El tenista español y número tres del mundo, Rafael Nadal, ha conseguido el pase a la final del Masters 1000 de Roma, tras imponerse en la semifinal al también español David Ferrer (7-6 (6), 6-0), por lo que se disputará el trofeo contra el ganador de la otra semifinal entre el serbio Novak Djokovic y el suizo Roger Federer.
Nadal consiguió la victoria sin realizar un gran partido ante un Ferrer que fue perdiendo el ánimo con el transcurso del encuentro. Tras tres derrotas consecutivas ante el mallorquín, Ferrer quería desquitarse pero su moral se acabó desquiciando y cayó ante Nadal por cuarta vez consecutiva, la duodécima sobre tierra.
El alicantino sabía que tenía que saltar a la pista muy concentrado y comenzar con mucha intensidad en los primeros juegos. Ferrer conoce muy bien a Nadal y sabe que el mallorquín siempre intenta romper el servicio a las primeras de cambio, así que empezó jugando al mismo ritmo que el balear.
El número tres del mundo se vio sorprendido por el inicio de Ferrer y le costó muchísimo hacerse con su primer servicio, aunque lo acabó subiendo a su marcador después de salvar siete bolas de ‘break’. Nadal estaba muy espeso y Ferrer aprovechó el momento para conseguir una rotura y ponerse 3-1.
El mallorquín estaba cometiendo demasiados errores no forzados, muchos más que habitualmente y parecía cansado. Sin embargo, al perder su saque, Nadal reaccionó y le devolvió el ‘break’ a Ferrer antes de que éste lo pudiera saborear (3-3). Fue un gran golpe para el alicantino pero siguió intentando forzar la máquina y tuvo una nueva bola de ‘break’, la décima, pero la volvió a desaprovechar.
La moral de Ferrer iba disminuyendo con el paso de los juegos pero continuaba con fuerzas para seguir luchando, ya que Nadal tampoco estaba mostrando su mejor nivel. Los dos españoles se centraron en mantener su saque en los juegos clave y condenaron el set un ‘tie-break’ en el que Ferrer volvió a tener ventaja en el marcador pero acabó cediendo por 8-6.
Cambio radical en el segundo set
Ferrer se vino abajo tras caer en la primera manga mientras que al mallorquín le ocurrió justo lo contrario y empezó a jugar mucho más relajado. El set que llevaba a favor hizo que el balear se quitara la presión de encima, por lo que empezó a soltar su brazo y cometió muchos menos errores.
A las primeras de cambio, Nadal ya se había puesto con un ‘break’ a favor y Ferrer parecía completamente perdido. El alicantino sólo despertó cuando perdía por 3-0 y salvó cinco bolas de rotura pero tampoco pudo evitar la cesión de su saque y acabó siendo un testigo más del 6-0 de Nadal.
Djokovic se impone a Federer
El tenista serbio y número uno del mundo, Novak Djokovic, jugará la final del Masters 1000 de Roma frente al español Rafael Nadal después de eliminar en las semifinales del torneo al suizo Roger Federer (6-2, 7-6(4)), por lo que se verá las caras con el español por tercera vez esta temporada.
Djokovic demostró una vez más por qué lidera el ranking ATP y dio un golpe de efecto tras la derrota sobre la polémica tierra de Madrid. El serbio aprovechó los errores de Federer y se impuso al suizo en dos sets para defender el título romano este domingo ante Nadal en la final.
El serbio salió muy concentrado desde el primer minuto y no tardó en sorprender a Federer. El suizo disputó los primeros juegos con mucha intensidad pero fue disminuyendo a partir del tercero, sobre todo gracias a la presión a la que estaba siendo sometido por el número uno del mundo.
Djokovic estaba golpeando muy fuerte la pelota y Federer no estaba demasiado cómodo sobre la tierra romana y lo mostraba en su saque, con el que cometía muchos errores. El serbio lo vio perfectamente y lo aprovechó para meterse dentro de la pista a la hora de restar y presionar más aún al suizo.
Federer se veía incapaz de hacerle frente a las bolas del serbio y acabó cediendo un ‘break’ en el tercer juego (2-1). Djokovic ya tenía ventaja en el marcador y relajó la presión, pero seguía golpeando muy fuerte a la bola, sobre todo con su servicio. El serbio se centró en ir aumentando su marcador con sus saques hasta acabar cerrando el set con un nuevo ‘break’ y con un 6-2.
En los últimos momentos del set, Federer lo daba casi por perdido y se centró en el inicio de la segunda manga. Djokovic le había visto las intenciones al suizo y salió con la misma intensidad que en el primer set, llegando a disponer de una bola de ‘break’ en el primer juego.
El helvético mejoró mucho su juego a partir de ese punto con el que prácticamente salvaba el partido. La efectividad del primer saque del suizo aumentó considerablemente y, pese a que seguía cometiendo algunos errores con sus golpes de fondo, acabó metiéndose de nuevo en el partido.
Djokovic estaba leyendo muy bien el partido y había visto que Federer había mejorado, así que se centró en conservar su saque y esperar su momento al resto. Y acabó llegando, en el séptimo juego del set, cuando aprovechó una de las dos bolas de ‘break’ de las que dispuso para colocarse 4-3. A partir de ese momento, el serbio sólo tenía que mantener su saque para pasar a la final pero cedió un ‘break’ cuando iba 5-4 después de desaprovechar una bola de partido. Aún así, el serbio supo controlar los nervios y esperó al ‘tie-break’ para adjudicarse el partido.