La presidenta del Comité Federal del PSOE, Verónica Pérez, ha abandonado la sede socialista de Ferraz tras dos horas de espera en su vestíbulo sin que nadie la haya recibido.
Pérez ha acudido este jueves a Ferraz para pedir que se convoque una reunión urgente de la Comisión de Garantías y Ética del partido para que realice un informe que «arroje luz» ante la situación creada por la dimisión de diecisiete miembros de la ejecutiva.
Pese a sus palabras, fuentes de Ferraz han asegurado que Pérez ha sido recibida por el gerente del partido, aunque otras fuentes cercanas a la dirigente andaluza han explicado que sólo la ha acompañado para registrar su petición de que se reúna la Comisión de Garantías socialista.
A la salida de la sede del PSOE, la presidenta del Comité Federal ha reconocido que la situación ha acabado con su paciencia porque ha tenido que esperar en el vestíbulo sin poder ir a otras dependencias.
«Es muy triste. Cómo se puede interpretar que yo o cualquier militante socialista, podemos ser una amenaza, porque entiendo que alguien piensa que somos una amenaza para algo cuando no nos dejan acceder a las dependencias de Ferraz», ha añadido.
Ha insistido en que ha pasado dos horas en la sede socialista sin que nadie le dé respuesta alguna a nada y que ha solicitado información y documentación para ejercer su responsabilidad y su trabajo como presidenta del Comité Federal.
«Estas dos horas me demuestran que es más necesario que nunca un informe de la Comisión de Garantías», ha insistido antes de confiar en que la presidenta de la misma, Isabel Celáa, convoque para hoy una reunión.
Al preguntarle con quién pretendía reunirse, ha explicado que quería hacerlo con «la gente de organización» para que le faciliten información con el fin de poder desempeñar su labor como presidenta del Comité.
«Es mi partido, lo quiero mucho y voy a ejercer mi responsabilidad. Lo voy a hacer», ha garantizado.
«Soy la única autoridad en el partido»
Pérez se ha arrogado este jueves la condición de ser la única autoridad del partido en este momento tras la dimisión este miércoles de 17 miembros de la ejecutiva socialista.
Pérez, en declaraciones a los periodistas a las puertas de la sede del PSOE, ha pedido la convocatoria de la Comisión Federal de Ética y Garantías para que dirima la situación existente en el partido, emita un informe y «arroje luz a quienes hacen interpretaciones erróneas».
«En este momento, la única autoridad que existe en el PSOE, les guste o no, soy yo, porque me eligieron en el Comité Federal», ha explicado Pérez.
Para ella, es necesaria la convocatoria urgente de la Comisión Federal de Ética y Garantías y ha confiado en que nadie la esté secuestrando» porque eso sería «lo último» -ha dicho- que faltaba por ver.
Un comentario que ha realizado tras informar de que ayer habló con cuatro de los cinco integrantes de esa comisión porque el quinto, la presidenta de la misma, Isabel Celáa (afín a Sánchez), no se puso al teléfono.
Verónica Pérez ha recalcado que todos los militantes socialistas saben que la dimisión del secretario general o de más de la mitad de integrantes de cualquier ejecutiva, tanto federal como autonómica o provincial, supone la disolución de la misma.
«Intentar buscar una maniobra reglamentaria o estatutaria para atrincherarse en Ferraz no es estar a la altura de lo que merece este partido, sus siglas, sus valores y su historia», ha añadido.
También ha instado a actuar con «dignidad personal y política». «Si me dimitieran 17, me iría a mi casa«, ha añadido la presidenta del Comité Federal y dirigente andaluza cercana a Susana Díaz.
EFE