Alfonso Fernández Ortega, más conocido como 'Alfon', pasó la noche en los calabozos de los juzgados de Plaza de Castilla después de ser detenido por orden de la Audiencia Provincial de Madrid en cumplimiento de la sentencia del Tribunal Supremo que confirmó su condena de cuatro años por un delito de tenencia de explosivos.
Cerca de medio millar de personas se concentraron alrededor de la Iglesia de San Carlos Borromeo, popularmente conocida como la Iglesia Roja de Entrevías, para tratar de impedir que la Policía apresara a 'Alfon'. El 'muro humano', convocado a través de las redes sociales desde que se supo que la Audiencia Provincial de Madrid había ordenado el ingreso en prisión de este joven de 23 años, llegó a congregar a cerca de 500 personas. La Policía acudió a la zona con medio centenar de agentes. El joven decidió abandonar la parroquia y entregarse, momento en el que se produjeron conatos de cargas. La madre del chico llegó a derrumbarse, la muchedumbre estalló en gritos contra la 'policía fascista' y el joven fue detenido.
La propia madre de 'Alfon', Elena Ortega, ha declarado en los alrededores de los juzgados de Plaza Castilla que se trata de situación «inaudita», algo que ha sido desde que todo empezó. «Es una persecución ideológica y una condena política. Nos quieren lanzar el mensaje ejemplarizante de que tenemos que tragar o de lo contrario nos pasará esto», ha señalado. Tras señalar a Cifuentes como una de las «máximas responsables», agregó que la lucha «no es sólo por su hijo, sino por todas las familias de arrestados en protestas».
Por su parte, el Sindicato de Estudiantes ha lanzado un comunicado en el que tilda la detención como «una persecución política» y propio de «un montaje policial».
Para el colectivo el único delito que ha cometido 'Alfon' es «el de ser un joven de izquierdas que lucha por cambiar las cosas». Afirman que la acusación de tenencia de explosivos es «tan falsa que queda refutada por la propia actuación de los agentes que le detuvieron, que decidieron llevar la supuesta carga explosiva entre sus propias piernas en el asiento del copiloto del coche con el que se dirigieron a la comisaría a dejar el supuesto artefacto». El sindicato explica que «no es creíble» que si la Policía piensa que ha incautado una bomba se la ponga entre las piernas. Esta y muchas otras son las inverosímiles “irregularidades” que denuncian en el comunicado. «Alfon ha sido condenado a cuatro años de prisión sin que haya una sola prueba que sostenga la acusación policial», aseveran.
Por último, «animan» a a todos los jóvenes y trabajadores a participar en la manifestación que el próximo sábado tendrá lugar en Madrid a las 20.30 en Sol para pedir la libertad del compañero Alfon.
Madrid, empapelada con mensajes de apoyo
La ciudad de Madrid ha amanecido empapelada con cárteles de apoyo a 'Alfon' después de que ayer fuera detenido por orden de la Audiencia de Madrid tras ser ratificada su condena a cuatro años de cárcel por tenencia de explosivos. Los carteles rezan frases como 'Alfon Libre, Libertad de los presos políticos' y 'Alfon Libertad', entre otras. Se encuentran desplegados por varios barrios madrileños como Vallecas, Vicálvaro, Moratalaz, Canillejas y Moncloa. También hay varios en Plaza de Castilla, donde 'Alfon' está a la espera de que se le asigne una prisión para ser trasladado por la conducción de la Guardia Civil.
La convocatoria de la huelga para el próximo sabado a las 20.30 horas que tendrá lugar en Sol, parte de familiares, amigos y compañeros del joven después de que el Tribunal Supremo haya confirmado la condena a cuatro años de cárcel. Fuentes de la Delegación de Gobierno en Madrid han señalado que la marcha está comunicada y autorizada. La manifestación arrancará a las 20.30 horas en la Puerta del Sol para dirigirse hasta el Ministerio de Justicia, atravesando Callao y Gran Vía.
Los magistrados de Audiencia madrileña impusieron al joven una pena de cuatro años de prisión por un delito de tenencia de sustancias explosivas, delito recogido en el artículo 568 del Código Penal. La Fiscalía solicitó en el juicio una condena de cinco años y seis meses de cárcel.
Según el fiscal, el acusado se encontraba ese día en las proximidades de la avenida de Buenos Aires de Madrid portando una bolsa de plástico de gran tamaño, en cuyo interior había un artefacto explosivo de fabricación casera.
En el juicio, 'Alfon' denunció que la Policía le amenazó con imputarle tenencia de explosivos si no identificaba fotográficamente a miembros de los bukaneros, una de las peñas del Club deportivo Rayo Vallecano, u otros jóvenes de grupos antifascistas.
El procesado relató entonces que el 14 de noviembre de 2012 se dirigió a casa de su tío Alfredo para más tarde acudir a un piquete informativo de la huelga para «realizar labores de información». Cuando se encontraba en la Avenida de Buenos Aires, un dispositivo policial le detuvo.
En contra de la versión de los agentes, negó que tanto él como sus acompañantes portaran ninguna bolsa y explicó que fueron los policías quienes les exhibieron la mochila en el momento de la detención.