Después de que se hayan reunido este mediodía varios miembros de la dirección del grupo parlamentario con el secretario general del grupo, Guillermo Mariscal, a la cabeza para encarar la sesión de control al Ejecutivo y reiterar su petición de cese de Egea, éste ha decidido no intervenir en el pleno.
Sin embargo, el presidente del PP, Pablo Casado, sí tiene previsto preguntar al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, sobre las «cesiones» a «sus socios independentistas para mantenerse en la Moncloa».
Tras la reunión preparatoria de esta sesión de control, a la que también ha acudido la diputada Cayetana Álvarez de Toledo, se han escuchado críticas muy duras dirigidas a Egea.
El portavoz adjunto del grupo parlamentario del PP, Mario Garcés, ha acusado al secretario general de llevar al PP a una situación insostenible, de hacer una política «pueril» y de fracturar el partido.
Garcés, uno de los siete firmantes de la dirección del grupo parlamentario que ha solicitado la convocatoria urgente de un congreso extraordinario y la destitución de Egea, ha señalado que ha secundado el escrito «con un gran dolor», pero ante una situación «histórica» que vive el PP y que ha llegado a un momento «absolutamente insostenible».
«Ha sido muy doloroso firmarlo, pero no ha quedado otro remedio», ha señalado Garcés, toda vez que el grupo parlamentario se ha reunido este mediodía para encarar la sesión de control al Gobierno de mañana.
Garcés ha sido muy claro al acusar a Egea de hacer durante dos años «una forma de política intolerable».
«Ha fracturado el partido, ha fracturado el grupo parlamentario del PP, ha fracturado las organizaciones políticas y ha provocado una gran desafección desde un punto de vista de la base. Ha sido una forma absolutamente pueril e infantil de hacer política», ha recalcado el diputado que dirige temas económicos en el grupo parlamentario.
Ha defendido el cese de Egea y la convocatoria de un congreso extraordinario porque «es el deseo de la inmensa mayoría de los simpatizantes, de los votantes y de los afiliados del PP», ha incidido.
«Somos el centro derecha de este país, y lo que requerimos es responsabilidad, integridad y hemos llegado ya a un punto intolerable», ha aseverado.
Por otra parte, el secretario cuarto de la Mesa del Congreso, Adolfo Suárez, también ha sido incisivo al señalar que «hay momentos en los que quienes asumimos responsabilidades políticas no nos podemos esconder» y ha puntualizado que se debe al partido y a sus votantes. EFE
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