El balance de víctimas mortales provocado por el terremoto de 7,2 grados de magnitud en la escala Richter que sacudió Filipinas a primera hora del martes ha ascendido a 156, según ha informado el Consejo Nacional de Gestión y Reducción de Desastres del país.
En su último informe sobre el suceso, el organismo ha detallado que además hay 374 heridos y 22 desaparecidos, por lo que se teme que el balance de fallecidos pueda aumentar en las próximas horas.
La provincia más afectada es la de Bohol, donde se ubicó el epicentro del terremoto, donde por el momento se han recuperado 144 cadáveres y se ha localizado a 188 heridos. Además, todos los desaparecidos eran residentes del lugar.
La segunda provincia más afectada es Cebú, donde se han registrado once fallecimientos y 182 heridos, seguida de Siquijour, con un muerto y tres heridos. Por último, se ha registrado un herido en Negros Oriental.
En total, más de tres millones de personas se han visto afectadas por el fuerte terremoto. Asimismo, más de 2.000 casas han sufrido daños estructurales totales o parciales. Según las estimaciones iniciales del Departamento de Obras Públicas y Carreteras (DPWH), los daños provocados por el seísmo ascienden a 57,8 millones de pesos filipinos (unos 989.000 euros), mientras que en Cebú ascenderían a 71,15 millones (unos 1,29 millones de euros).
Edificios bajos se han derrumbado en al menos dos islas y varias iglesias históricas han sufrido grietas y se han venido abajo durante el terremoto, que ha generado el pánico, provocado el corte del servicio eléctrico e interrumpido el transporte, además de obligar a los hospitales a evacuar a sus pacientes.
Entretanto, el presidente del país, Benigno Aquino, ha prometido este miércoles durante una visita a la zona afectada por el seísmo ayuda para restaurar las iglesias centenarias de Bohol que se han visto dañadas.
ENo obstante, Aquino ha dicho que por ahora no puede comprometer un cifra exacta por parte del Gobierno, pero ha asegurado que conseguirá la ayuda para «al menos conseguir que vuelvan a estar físicamente como estaban». «No quiero hacer compromisos ahora (pero) podéis esperar de mí que ayude a conseguir que el sector privado ayude», ha aseverado.
Entre las iglesias dañadas por el terremoto figuran la Iglesia de San Pedro, en Loboc, y la Iglesia de Nuestra Señora de la Inmaculada Concepción en Baclayon, ambas conservadas por el Museo Nacional con la financiación de la Comisión Nacional para la Cultura y las Artes (NCCA).