- Los gestores buscan reorganizar las parrillas buscando público joven para Cuatro y más adulto y femenino para Telecinco
- Desde el verano, Cuatro ha bajado dos puntos en audiencia, mientras que Telecinco no consigue desbancar a La Primera de la posición de líder
La estrategia de reorganización de las parrillas de Telecinco y Cuatro no está yendo como los directivos de la cadena de Fuencarral esperaban cuando absorbieron Sogecable. La idea es dedicar la emisora emblema del grupo, Telecinco, al público adulto y femenino, y dejar Cuatro para los más jóvenes, en competencia con La Sexta. Para conseguirlo, qué mejor que trasladar a algunas de las estrellas de uno a otro canal. Así, Jesús Vázquez, Tania Llasera o Hilario Pino han desembarcado en Cuatro, pero las cifras no acaban de darle la razón a estos movimientos.
La antigua cadena de Prisa acabó febrero con un 6,5% de audiencia, solo dos décimas por encima de La Sexta; mientras que Telecinco se mantiene en el segundo puesto del ranking, con 14,4%, a siete décimas del líder, La Primera de TVE. El problema, a pesar de la tenue subida de Cuatro desde enero (cuando logró un 6,3%), es que los programas presentados por las estrellas trasvasadas de cadena no se acercan a estas cifras.
La semana pasada, Fama, a bailar, que había sido estandarte de las tardes de Cuatro cuando lo presentaba Paula Vázquez, dejaba de emitirse. El dato de audiencia del día es esclarecedor: 3,7%. El cambio de la gallega por Tania Llasera, fichada en su día a golpe de talonario por Telecinco cuando colaboraba en El Intermedio —el programa del Gran Wyoming en La Sexta—, no ha contado con el beneplácito de los espectadores.
Otro espacio que no está consiguiendo las cifras esperadas es ¡Allá tú!, presentado por Jesús Vázquez, quien ya lo condujo en Telecinco. En la misma jornada que terminaba Fama, atrajo la atención de medio millón de telespectadores, hasta alcanzar el 5,4% del share. El presentador, chico para todo en Telecinco, mantiene este perfil en Cuatro y ya ha sido anunciado como presentador de la próxima edición de Pekín Express, hasta ahora conducido por Raquel Sánchez-Silva.
Sólo Florentino se salva en Cuatro
“Cuatro está muy debilitada en el tramo de tarde, entre las ediciones de las noticias”, asegura a ESTRELLA DIGITAL Javier López, gerente de Análisis de Barlovento Comunicación. En esta franja horaria, solo se salva Tonterías las justas, que presenta Florentino Fernández, “a pesar de ir un poco por debajo de la media de la cadena, porque gana a Sé lo que hicisteis, que es competencia directa en La Sexta”, añade López.
En diversos foros de internet se explica el traslado de Jesús Vázquez a Cuatro por la pérdida de liderazgo dentro de la cadena de Fuencarral. En las últimas temporadas, el público ha optado por otro Vázquez, Jorge Javier, convertido ahora en la estrella de Telecinco. Así, Mediaset ha optado por encontrarle un nuevo nicho a Jesús, aunque ahora no acabe de funcionar como se esperaba.
Asimismo, una tercera Vázquez, Paula, es objeto de todo tipo de rumores en la Red. Su traslado desde Fama para pasar a presentar, junto a Jorge Javier, Supervivientes se considera parte de una venganza personal de Paolo Vasile, consejero delegado de Telecinco, quien no habría perdonado la huida a Antena 3 que en su día llevó a cabo la presentadora, cuando era una de las estrellas del grupo. En principio, Paula estará a las órdenes de Jorge Javier en la siguiente edición del reality en una isla.
Mejor le van las cosas a Hilario Pino, que conduce el informativo de la tarde en Cuatro, con cifras alrededor del 8%, por encima de la media de la emisora. Aun así, desde el pasado verano, la audiencia total de este canal ha descendido dos puntos. Y todo indica que la cosa puede ir a más. “La tendencia es negativa para las antiguas generalistas, porque con tantos canales en el mercado se reparte más el pastel”, augura Javier López. Este analista considera que, en pocos meses, “con un 14% o un 13% de share una cadena será líder”.
Carbonero siempre triunfa
En este sentido, el reparto de publicidad se antoja clave a la hora de dibujar el mapa futuro de la televisión en España. En solo dos años, entre 2007 y 2009, la inversión publicitaria en este medio cayó desde 3.500 millones de euros hasta 2.300 millones. Por este motivo, “muchos canales pequeños tendrán difícil su supervivencia”, advierte Javier López. Y vaticina que “la tendencia será de concentración de la propiedad de los canales en menos grupos, aunque cada vez haya más cadenas”.
Un ejemplo de esta difícil supervivencia ha sido el reciente descalabro del canal GH24, que emitía durante todo el día desde la casa de Gran Hermano. Esta emisora, que nació con polémica tras la fusión, al ocupar la frecuencia de CNN+, cesaba sus emisiones antes del fin del reality estrella de Telecinco con una media del 0,5% de audiencia —menor aun que la de su predecesor—. Su espacio ahora lo ocupa Divinity, un canal dedicado a la mujer.
Ante estas perspectivas, los gestores de Telecinco y Cuatro siguen su proceso de adaptación de programas y presentadores según los targets de mercado de ambos canales, a la espera de dar con la tecla del éxito. Mientras lo consiguen, las estrellas caídas de Telecinco tienen una segunda oportunidad en Cuatro para justificar sus suculentos contratos. Aunque de momento, la única presentadora con estrella suficiente parece ser Sara Carbonero, quien se pasea por ambos canales (así como por uno italiano) con el beneplácito de la audiencia.