El secretario general de los ‘populare'» madrileños ha insistido en que no existe «una lucha» en el seno del PP por controlar Caja Madrid ni «una lucha de poder» en el partido, donde ha asegurado que «nadie» cuestiona la autoridad del presidente nacional, Mariano Rajoy.
Ha señalado que la entrevista a Manuel Cobo del pasado lunes «a quien de verdad puso en una situación complicada fue a Mariano Rajoy» y por ello ha considerado que debe ser la Dirección nacional del PP la que «asuma su responsabilidad» y adopte las medidas contra lo que ha denominado «una falta de libro» del vicealcalde que merece ser «acreedora de una sanción».
Granados ha asegurado que Aguirre «tiene un apoyo absolutamente mayoritario» en el PP, como demuestra el manifiesto de adhesión a la presidenta suscrito por 105 de los 111 alcaldes «populares» de la Comunidad y lo ha comparado con lo que ocurrió hace unos años, cuando Ruiz-Gallardón y Cobo decidieron presentar candidatura a la presidencia regional «y tuvieron que retirarla porque no les apoyó prácticamente nadie».
Personalmente ha dicho que no se siente «aguirrista ni estoy en el PP por Esperanza Aguirre», pues considera que las «adhesiones inquebrantables no son buenas», y ha dicho que milita en el partido solo porque comparte sus ideas y principios.
El PP de Madrid no cuestiona a Génova
También ha señalado que «nosotros no cuestionamos en absoluto la dirección nacional» del PP y que si «otros» la ponen en una «situación complicada, tendrán que asumir su responsabilidad», pero por encima de todo ha dicho que la actuación de Rajoy en el tema ‘Gürtel’ y en Caja Madrid «va en la buena dirección, en la de poner orden a estas cuestiones».
Sobre la candidatura del vicepresidente regional, Ignacio González, para presidir la Caja, ha destacado que reúne «una característica que no tiene nadie: el apoyo mayoritario» de los sectores representados en la entidad, mientras que el Ayuntamiento de Madrid siempre ha estado a favor de la permanencia del actual presidente, Miguel Blesa.