La Ministra de Educación, Mercedes Cabrera, ha advertido este jueves al PP de que insinuar que el Gobierno conocía el fallo del Tribunal Supremo sobre Educación para la Ciudadanía antes de hacerse público supone «cuestionar» al tribunal y ha aclarado que el vídeo con su reacción se divulgó tras conocerlo. En declaraciones a los periodistas, Cabrera ha salido así al paso de las acusaciones del PP, que ha asegurado que pedirá en el Congreso el vídeo en el que Cabrera reacciona al fallo del Supremo, que este partido sostiene que se grabó antes de hacerse pública la sentencia.
Tras visitar una escuela pública de Barcelona acompañada por el conseller de Educación, Ernest Maragall, la ministra ha subrayado que el vídeo «se colgó después de la nota del Supremo», aunque sí fue grabado con antelación sabiendo que el fallo era inminente.
«El vídeo no tenía más objetivo que facilitar a los medios de comunicación nuestra opinión tras dos días largos de espera. Sacar otras conclusiones es volver a introducir elementos que no tienen nada que ver y cuestionar al Tribunal Supremo, lo que es más grave», ha dicho Mercedes Cabrera.
La ministra ha insistido en que cursar la asignatura de Educación para la Ciudadanía «es obligatorio», ya que no es posible objetar, y que todos los ciudadanos, además de derechos, tienen la obligación «de acatar las leyes del Parlamento y las sentencias de los tribunales».
Preguntada sobre qué puede pasar si algunos escolares continúan sin asistir a estas clases, ha asegurado: «no quiero imaginarlo», para después apuntar que entiende que esta sentencia debe unificar criterios, así que confía en que «se actúe en consecuencia».
La ministra ha recordado, además, que esta asignatura es igual que cualquier otra, por lo que la no asistencia a clase puede tener consecuencias a la hora de pasar de curso y de obtener una titulación.
El conseller de Educación, Ernest Maragall, ha apuntado que en Cataluña sólo medio centenar de alumnos de tercero de Primaria y unos veinte de primero de Bachillerato habían objetado.
El departamento se pondrá en contacto con los centros escolares a los que asisten estos alumnos con el objetivo de que sean ellos los que consigan convencer a los padres para «normalizar la situación» y que los niños empiecen a asistir a la clase de Educación para la Ciudadanía. EFE
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