Bravo, un seguro (7). El guardameta apenas tuvo trabajo. Pero lo sacó con nota. Estuvo muy bien con los pies y paró un potente disparo de Bruma que estaba a escasos metros de la portera. Grandes reflejos.
Alves, el asistente (8,5). El brasileño se sumó al ataque de forma constante. Desde la derecha puso dos buenos balones al área que Neymar y Suárez convirtieron en goles.
Piqué, firme por arriba (6,5). El central tuvo poco trabajo, pero despejó la gran mayoría de centros de la Real Sociedad. En esa faceta, le ganó la partida a Vela y Agirretxe.
Mascherano, poco participativo (6). No fue su culpa, apenas tuvo que intervenir. No se sumó en ataque y apenas se notó su presencia. Dejó su sitio a Bartra.
Mathieu, multiusos (7). El francés robó un balón en su área que podría haber supuesto un peligro para Bravo. Apareció en ataque por el lateral zurdo y puso en bandeja a Neymar el tercer gol.
Rakitic, el control (6,5). No fue el que más destacó en el centro del campo. Fue de más a menos. Pero junto a Busquets, permitió que el equipo mantuviera el dominio en casi todo el partido.
Busquets, equilibrio (6,5). Fue de nuevo el cierre del Barcelona. El hombre que se encargó de que las figuras de la Real Sociedad sufrieran para llegar a zona de tres cuartos de campo.
Iniesta, el mago (7). Suena a tópico, pero el manchego volvió a dejar detalles de su enorme calidad. Conectó con los delanteros y facilitó alguno de los goles que se anotaron.
Messi, la gran reaparición (7,5). Dos meses después volvió a ser titular en Liga. Se nota que le falta cierto ritmo, pero es igual de peligroso. Buscó su gol y lo encontró a última hora.
Neymar, el goleador (9). El brasileño volvió a erigirse como el mejor. Su juego maravilló a los aficionados. Anotó dos tantos y sirvió en bandeja a Messi el cuarto. Lideró una nueva victoria de su equipo.
Suárez, el depredador (8,5). El uruguayo anota. Sea como sea. Hoy, de volea. Siempre está en el área al acecho. Junto a Neymar y Messi, desesperó a la defensa rival de forma constante.
Luis Enrique (7). No se complicó en la alineación. Apostó por la ‘MSN’ de nuevo y con el centro del campo esperado. Quiso dosificar a sus jugadores y realizó muy pronto los cambios.
Adriano, una carrera prodigiosa (7,5). El lateral sustituyó a Mathieu y ofreció al público una de las mejores jugadas del encuentro. Desde la derecha inició una veloz carrera en la que dejó atrás a tres rivales.
Alba, sin tiempo (6). El partido reunía las características para que el lateral hubiese disfrutado. Sin embargo, cuando saltó al terreno de juego el partido ya no tenía esa chispa de intensidad.
Bartra, sangre joven (5,5). Saltó al campo en lugar de Mascherano. Aparentó tener ganas, pero no pudo ser protagonista. Permitió el disparo de Bruma en el tramo final del encuentro.