Pep Guardiola ha vuelto a hacer gala de su carácter autoritario en una entrevista publicada en la revista del Bayern ‘Magazin‘. El técnico catalán ha querido celebrar los 100 días en el banquillo bávaro con esta entrevista en la que ha dejado claro a sus jugadores quién es el jefe.
«Soy un gran amigo de mis jugadores si aceptan lo que yo digo. Apoyo a quien acata mis decisiones. Sin embargo, quien no quiera entenderlo se sentará con frecuencia en la tribuna», afirma Guardiola en la entrevista. A lo largo de su trayectoria como entrenador del Barça al de Santpedor no le ha temblado el pulso para dejar en el banquillo a sus jugadores, y si no que se lo pregunten a algunas de las víctimas de su autoritarismo como Ibrahimovic o Eto’o. Para el nuevo entrenador del Bayern el éxito del equipo en su conjunto debe estar siempre por encima de los intereses individuales.
Gaurdiola también reconoció que está soprendido por lo rápido que su plantilla ha entendido su proyecto. «Me ha sorprendido un poco la rapidez con la que los jugadores han asumido mis ideas. Creí que necesitaríamos más tiempo», dijo Guardiola, quien cree el nivel del equipo es muy alto pero que aún puede mejorar más cuando todos los jugadores encuentren la forma.
El entrenador se ha mostrado muy feliz por el arranque de su equipo, líder en la Bundesliga con un punto más que el Borussia Dortmund y también líder en solitario del grupo D en la Liga de Campeones, aunque para él la clasificación del equipo es anecdótica. «En estos momentos lo que cuenta es que encontremos nuestra forma de juego. Nos encontramos en medio de un proceso y tras las actuaciones contra el City y el Leverkusen, hemos alcanzado un buen nivel», asegura.
Guardiola también tuvo palabras de admiración para uno de sus jugadores, Philipp Lahm. «Es uno de los jugadores más inteligentes del mundo y estoy completamente seguro de que, tras un breve periodo de aclimatación, estaría entre los mejores en cada posición que le hicieras jugar», explicó