Manuel Pastrana, el secretario general de UGT Andalucía con Visa Oro, ha anunciado que no concurrirá a un quinto mandato en el X Congreso Regional que el sindicato celebrará en Sevilla en la primera quincena de mayo. Esa es la noticia. Lo que no deja de ser una media verdad. Entre otras cosas porque no tenía más salida. Del escándalo de los EREs falsos andaluces, mal que bien, se podía escapar porque la cosa aún se está investigando, pero que al tío no le dolieran prendas en cargar 852,35 euros de una comida en Durban (Sudáfrica) a la Visa Oro de la organización el mismo día en que el sindicato anunció un ERE para despedir a 159 de sus trabajadores en la comunidad andaluza era demasiado fuerte.
La Justicia cree que UGT-Andalucía mintió al justificar el ERE que aplicó a esos trabajadores
Y más, cuando la Justicia cree que UGT-Andalucía mintió al justificar el ERE que aplicó a esos trabajadores, alegando que no tenía ayudas, pese a recibir 23 millones de euros, 23. Increíble pero cierto. Las mentiras, dicen en mi pueblo, tienen las patas muy cortas.
Pero hay más, ese mismo Tribunal de Justicia asegura que esa subvención de 23 millones de euros que recibió UGT Andalucía no se utilizó en los programas de fomento de empleo a que estaban destinados sino que se utilizó para pagar gastos corrientes de las estructura del sindicato como alquileres, mobiliario, asesoría externa jurídica e incluso las nóminas de empleados que no mantenían relación con este tipo de programas y que no deberían cobrar por estos ingresos de la organización. Sirvieron, incluso, para pagar medio millón de euros en Visa. Se supone que Oro. No puede ser menos. Como Pastrana era y es muy amigo de Cándido Méndez, todo valía…
Pero hay más, porque la cosa de don Manuel tiene tomate. Este personaje también anda cuestionado con el tema de los EREs falsos por su relación con el ex mandatario ugetista Juan Lanzas, el Conseguidor, y bajo sospecha porque presidía la asociación Faja Pirítica de Huelva, creada en 2003, que cobró EREs irregulares. Un angelito vaya.
Con la retirada táctica de Pastrana se soluciona el pastel
Ahora dice que no se presenta a la reelección en el Congreso ugetista, clarísimamente, para echar agua al fuego. Porque da la casualidad de que el Congreso de UGT se celebra entre los días 9 y 11 de mayo. Y el 9 y el 11 van detrás del día 1. Del 1º de mayo. Del día sindical por excelencia. Y, ay amigo, a muchos les gustaría ver con qué carita se ponía, este año, detrás de la eterna pancarta con esos lemas decimonónicos que nos regalan anualmente. Con la retirada táctica de Pastrana se soluciona el pastel.
Aún así, me temo que la Visa Oro y los EREs andaluces van a poner a muchos sindicalistas en su sitio en todas las manifestaciones que se lleven a cabo ese día. Y especialmente, en el momento de los discursos de sus líderes. Aunque en el sindicalismo español es difícil que nadie se ponga colorado.
En cualquier caso, todo se andará cuando a los sindicatos se les obligue a pasar por la piedra de la transparencia. Es cuestión de tiempo. Ahí sí que nos vamos a reír averiguando a donde va tanta pasta como entra en estas trasnochadas organizaciones.
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La sonrisa de la avispa