En declaraciones a El Punt Avui, Torra ha dicho que entre los motivos por los que la siniestralidad en las residencias está siendo tan elevada destaca el hecho de que no estaban medicalizadas, así como la «enorme escasez de material de protección» en los primeros días de pandemia.
«De la misma manera que en el sistema sanitario había músculo, una preparación, potencia y capacidad para hacer frente a la ola, nos hemos dado cuenta de que las residencias no estaban preparadas para una catástrofe como la que venía, como tampoco estaban preparadas en Inglaterra, por ejemplo», ha señalado.
Esto, a su juicio, «merece una reflexión muy profunda en Cataluña pero creo que en todo el mundo» porque «no puede ser de ninguna de las maneras que el sistema sociosanitario continúe así».
Torra también ha hecho «autocrítica» en cuestiones económicas: «No hemos estado suficientemente ágiles seguramente en algunas decisiones que hemos tomado a la hora de favorecer a nuestros emprendedores o los trabajadores».
«Pongo el grito en el cielo a veces por cómo aún la burocracia nos atenaza a la hora de tomar decisiones», ha añadido Torra, que ha señalado que este verano será «un drama» para el sector turístico: «La previsión es de devastación, tal como suena. La temporada turística está perdida».
Por otra parte, ha comentado que «es posible» que el plan de desconfinamiento que apruebe el Govern «matice o amplíe» aspectos recogidos en la propuesta elaborada por el epidemiólogo Oriol Mitjà.
En concreto, sobre la controvertida propuesta del llamado «pasaporte inmunitario», se ha mostrado cauto: «Ya veremos cómo acaba. Ahora unos expertos lo decidirán».
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