Este viernes a las 12 de la noche arrancaba la que para muchos es “la campaña del paro”. En el caso del Partido Popular destacaron dos actos. En primer lugar en Castelldefels (Barcelona), donde se encontraba el líder de la formación y candidato a la Presidencia, Mariano Rajoy, acompaño por la presidenta de los ‘populares’, Alicia Camacho y su directora de campaña, Ana Mato. Y en segundo lugar en Madrid, en la capital del reino, los número 2 y 4 en la lista por Madrid al Congreso, Soraya Saénz de Santamaría y Alberto Ruiz-Gallardón, respectivamente; la presidenta del PP madrileño, Esperanza Aguirre; y el número 1 de la lista del PP al Senado, Pío García Escudero, han realizado una colgada virtual de carteles y cerca de 300 simpatizantes han escuchado las primeras palabras de los candidatos en campaña.
Tras una noche de emociones acumuladas por la que se vislumbra es una campaña más que ganada, tal y como refleja la última encuesta del CIS, los principales miembros de la lista ‘popular’ han continuado este viernes con su agenda de actividades electorales. El primero en volver a hablar ha sido el líder de la formación, quien ha concedido su primera entrevista de campaña a ABC Punto Radio, donde ha podido volver a explicar algunos de los puntos más importantes de su programa electoral. Las novedades introducidas en el discurso de este viernes respecto al de apertura de campaña han sido escasas. El cambio y el paro siguen siendo las palabras que más se repiten en sus explicaciones. No obstante, este viernes en la radio del Grupo Vocento ha introducido una novedad que hasta el momento no se había comentado en público y es la posibilidad de que si gana no se traslade a vivir a La Moncloa. El candidato a la presidencia, tras quedarse unos segundos en silencio ante la pregunta de Melchor Miralles, ha concluido: “Haré lo que tenga que hacer”.
Durante la entrevista, el líder ‘popular’ no ha abandonado el tono moderado que le ha caracterizado durante toda la precampaña. Ha insistido en sus medidas de austeridad y restructuración del sistema financiero y ha vuelto a apostar por la pymes, emprendedores y autónomos. En cuanto a los recortes ha asegurado que “meterá la tijera” en todo menos en las pensiones, la sanidad y la educación. Y se ha pronunciado sobre dos de los temas sociales más polémicos del Ejecutivo de Zapatero: aborto y matrimonio homosexual. En lo que al matrimonio homosexual respecta, ha dicho que no es una prioridad para él y que esperará a que el Tribunal Constitucional responda. Y en cuanto al aborto ha asegurado que su formación, si llega al poder, modificará la parte de la ley que permite a las menores de 16 años abortar sin el consentimiento de los padres.
Presentación del PPbus
Pocas horas después de la intervención de Rajoy, en la plaza madrileña de Felipe II, la número 2 de los ‘populares’, Soraya Saénz de Santamaría, acudía junto a la a presidenta del PP madrileño, Esperanza Aguirre y el senador del PP, Pío García Escudero, a la presentación del ya famoso PPbus. “Con esta iniciativa ponemos ruedas a la campaña del PP”, ha dicho la portavoz ‘popular’ en el Congreso.
Con este autobús, el PP madrileño pretende recorrer todos los rincones de la Comunidad y trasladar sus propuestas a los ciudadanos. “Ha llegado el momento de decir que no queremos seguir siendo la España de los cinco millones de parados”, ha jaleado la presidenta madrileña. “Diremos a Zapatero y Rubalcaba que estamos hartos de sus errores” y ha recordado Aguirre a los madrileños: “nos han ignorado, nos han asfixiado y nos han dado ‘cero Zapatero patatero’”.
A su juicio, la «política de improvisación» del partido socialista ha hecho que «hoy todos y cada uno de los españoles» se encuentren «de repente» con que los niños que nacen van a tener una deuda de 15.000 euros. En este punto, ha nombrado a los futuros hijos de Sáenz de Santamaría y de Álvarez de Toledo. Frente a esto, Aguirre ha asegurado que lo va a «arreglar el PP» pues «ha llegado el momento de acabar con este desastre que hoy se hace especialmente evidente» en el balance de los ocho años de gobierno socialista, que, en su opinión, ha dejado una España «arruinada, dividida, con menos prestigio internacional y a ETA en las instituciones».
Elsa Sardina Vejo