El Parlamento de Chipre ha aprobado este viernes la creación de un fondo de solidaridad y la instauración de restricciones para los capitales financieros, dos de las iniciativas promovidas en los últimos días para evitar el plan inicial sobre tasas a los depósitos bancarios. Chipre negocia una serie de medidas con las que satisfacer a la ‘troika’ –Comisión Europea, Banco Central Europeo y Fondo Monetario Internacional– y obtener un rescate de 10.000 millones de euros que le salve de la quiebra.