El Real Madrid es el club más laureado de España y ello es indiscutible aunque en determinadas temporadas pudiera ser catalogado como el equipo del régimen. El club hace años que traspasó fronteras y su nombre levanta pasiones dentro y fuera de España. Cualquier cuestión que le afecta es razón suficiente para que los medios informativos se ocupen del mismo. Tiene, además, la ventaja de que en el mundo de la información el número de militantes, de madridistas confesos, es muy superior al de cualquier otro club incluido el Barcelona.
El Madrid vende y ello justifica, en ocasiones, que se le dedique mayor atención que a los demás. Lo que está fuera de lugar es el hecho de que con demasiada frecuencia televisiones públicas y privadas le concedan el mismo espacio o más que a todos los demás juntos.
Ahora, en época navideña, con las competiciones detenidas, la presencia del Madrid es casi la única porque parece que no hay otra noticia que sus intenciones respecto de los fichajes. Ya ha invertido más de cuarenta millones de euros en época de crisis, ha recuperado a un jugador propio, pagando, y su entrenador, quien ya cuenta con tres nuevos jugadores, no se contenta y, con sentido, pide un extremo derecha con el fin de contar con dos hombres de banda ya que, por ahora, únicamente cuenta con Robben y éste, encima, es de cristal aunque, eso sí de Bohemia o Murano, como se prefiera.
El Madrid está en su derecho de contratar jugadores para suplir a los lesionados o simplemente para mejorar su plantilla si es que entre los actuales componentes del elenco hay alguno de medio pelo. Lo que debe exigírsele al club es más tino.
La historia invernal madridista está llena de petardazos, de futbolistas que pasaron por el club sin dejar huella. Estoy seguro de que si añadiera la lista de futbolistas que han pasado por el Bernabéu sin pena ni gloria habría gente que me atribuiría mala intención porque no tendría en la memoria nombres como los de Ognjenovic, Petkovic o César Prates.
Las intenciones que se anuncian hoy están basadas en algún jugador suplente en un club europeo.
Julián García Candau