El debate que no fue

Está visto que las improvisaciones en política y más si se está en campaña nos son buenas consejeras. A última hora y entre pasillos, Mas y Montilla acuerdan un cara a cara como si este tipo de eventos, cuando de una televisión pública se trata, se pudieran acordar como quien queda a tomar café. Al final, la Junta Electoral ha impedido el debate, un debate en el que Montilla quería dejar claro ante propios y extraños que no había tirado la toalla y Mas apuntalar esa incursión que detectan en sectores de izquierda y en esos otros más sosegados a los que lo del Concierto les suena bien, pero que su entusiasmo soberanista es perfectamente descriptible. Los que están en las bambalinas de ambos líderes no estaban especialmente entusiasmados con la idea, pero Mas no podía dejar sin respuesta el reto de Zapatero, ni Montilla dejar de reafirmar que, pese a las encuestas, él también puede ser presidente de la Generalitat. En Ferraz han dictado sentencia: “Si el PSC saca 34, Montilla no se va y CiU gobernará en solitario en segunda vuelta”.