Al comienzo de esta semana, los españoles más pesimistas empezaban a hablar del fracaso de esta delegación en Río, pero como suele ser habitual, la última semana de competición resultó ser la más fructífera para los españoles. Los deportistas españoles lograron 12 preseas en estos días, tres de ellas este domingo, cuando ya no se esperaba gran cosa.
No obstante, la gran sorpresa la protagonizó Carlos Coloma que sorprendió en el Cross Country a sus 34 años. De hecho, ninguno de los españoles estaban entre los favoritos, ya que todo el mundo pensaba que José Antonio Hermida y él eran demasiado mayores como para dar una sorpresa.
Sin embargo, el 'biker' logroñés protagonizó un auténtico carrerón en el que aguantó con los mejores durante mucho tiempo, pero tuvo que sufrir hasta el final para colgarse el metal al cuello, puesto que el francés Maxime Marrote le logró cazar cuando todavía quedaban algunas vueltas para el final.
Pese a todo, Coloma no se puso nervioso y protagonizó un duelo precioso con el galo en el que cada uno intentó atacar cuando se sintió más fuerte. Pese a todo, se llegó a la última vuelta con los dos ciclistas pegados, aunque un ataque del español a pocos minutos del final logró hacer mucho daño y abrir unos metros que resultaron decisivos.
La gran sorpresa
Por eso, Coloma subirá al podio por detrás del suizo Schurter, que fue oro, y del checo Kulhavy, que se tuvo que conformar con la plata. El español terminó la prueba en 1.34, 51 a casi un minuto y medio del mejor. David Valero, el más joven de los españoles se quedó en la novena posición a más de dos minutos de su compañero de selección. Hermida, con 37 años y medalla en Atenas, se conformó con la decimoquinta plaza.
Carlos Coloma había ganado anteriormente medallas en Mundiales y Europeos, pero hacía trece años que no se subía al cajón en un campeonato de estas características, aunque también fue sexto en Londres. No obstante, este ciclista con el que nadie contaba siempre confió en hacer algo grande en estos Juegos, puesto que el circuito le encantó desde la primera vez que lo vio. Por último, el experimento de Peter Sagan en esta categoría no salió del todo bien por culpa de varias averías mecánicas.
Felipe Poza