Mientras la renta variable sigue tomando posiciones alcistas, a pesar de algunos presagios que vaticinan problemas porque esta subida es sólo un rebote y no una tendencia alcista definida, los inversores mantienen sus prevenciones ante el desarrollo futuro de las alternativas de inversión. La gente sigue sin ver claro que el color rosa defina el horizonte y actúa en consecuencia. En marzo, de acuerdo con las cifras que ha facilitado este miércoles la patronal Inverco, los recursos gestionados por los fondos de inversión han vuelto a registrar un retroceso, esta vez del orden de los 1.800 millones de euros sobre el mes anterior. El dinero ha salido sobre todo de los fondos monetarios (conservadores, pero de muy baja rentabilidad, aunque algunos registran pérdidas), de los garantizados que tienen como referencia la renta variable y de los fondos de renta fija a corto plazo. Es decir, fondos en su mayoría de perfil netamente conservador pero que ofrecen muy escasa rentabilidad para los inversores, lo que parece indicar que el dinero de carácter defensivo sigue apostando por los depósitos, en donde las rentabilidades han descendido aunque conservan todavía un atractivo superior.
Lo que no está atrayendo a los inversores todavía es la renta variable, ya que su tendencia alcista sostenida desde principios del mes de marzo no ha sido capaz de atraer el dinero que manejan los fondos de inversión, por mucho que los analistas argumenten a favor de los activos bursátiles el hecho de que hay muchas compañías a precios muy atractivos, es decir, con potencial alcista a medio plazo. La escasa simpatía que tiene el riesgo entre los inversores españoles.
El mejor
Bankinter Kilimanjaro (Fondos Globales) + 12,23%
Los fondos de tipo global, que actúan en cualquier tipo de mercados a criterio del gestor en función de las oportunidades, cuentan con varios ejemplares cuyas ganancias superan los dos dígitos.
El peor
Privat Fonselección (Fondos Globales) – 21,84%
En el grupo de fondos de tipo global, las pérdidas de algunos de sus peores fondos superan ya el 20% en algunos casos debido a su elevada exposición a mercados bursátiles.
Primo González