La reunión, que según el consistorio fue un encuentro de trabajo en el que se sirvió comida porque se celebró a las 14.00 horas, tuvo lugar el pasado lunes, cuando no estaban permitida la actividad en el interior de restaurantes y en las terrazas no podían sentarse a la misma mesa más de cuatro personas de dos núcleos de convivencia.
El presidente del PP de Ibiza y portavoz en el Ayuntamiento, José Vicente Marí Bosó, ha instado al alcalde, Rafa Ruiz, a explicar “por qué una comida privada que no se podría celebrar en un bar o restaurante se hace en dependencias públicas”.
Además, reclama conocer si el gasto se ha cargado al erario público y las causas que “justifican saltarse todas las restricciones que se imponen a los ciudadanos”.
Marí Bosó ha criticado que mientras se “imponen sacrificios” y se pide “responsabilidad” a todos, “a la primera de cambio”, Ruiz “prepara una comilona a Armengol en el propio salón de plenos, incumpliendo las mismas normas que anunciaban el mismo día”.
El Ayuntamiento de Ibiza ha defendido que el encuentro fue una reunión de trabajo y no una comida, aunque se sirvieran viandas y bebidas.
«No fue una comida, sino una reunión con empresarios«, han asegurado fuentes municipales en respuesta a las críticas de la oposición.
El consistorio defiende un encuentro en el que se consuman alimentos y bebidas durante la jornada laboral está permitido «porque no se entienden como un encuentro social sino laboral”.
El pasado octubre, Armengol pidió disculpas después de que se hiciera público que estaba en el exterior de un bar de Palma al que acudió la policía porque incumplía el horario de cierre. EFE
A.M.