es una película musical que nace de un musical del teatro y que al mismo tiempo se inspira este en la película Ocho y medio de Federico Fellini. Demasiados bucles para llegar al cine creo yo.
es también un work in progress es decir el esfuerzo y los trabajo de hacer una película, un musical, una película musical. No está ni bien ni mal, más bien es una cosa digna que se sostiene sobre una mediocre partitura, una elección de actores que no saben cantar o bailar, en el recuerdo de viejas películas que un día fueron buenas, muy buenas y ahora son interesantes.
Es cierto que tiene más de película que de espectáculo musical y también que esconde con ejercicios circenses, montaje de videoclip y un escenario en el que los focos dejan muchas cosas a oscuras para que no veamos las limitaciones como mediocre bailarín de Daniel Day-Lewis o Judi Dench cantando con una voz de pollo pongamos por caso.
Y también es cierto que gracias a la calidad actoral de los intérpretes hay más película que musical. Por eso uno puede pensar si el director se parece al Fellini o más bien tiene un parecido razonable con Antonioni o quizás debería ser semejante a Marcello Mastroianni. Es decir que como la película es otra cosa uno se puede dedicar a los debates intelectuales.
Como no tiene ni la capacidad ni la calidad musical de Chicago ni la capacidad de sorpresa de Moulin Rouge tiene que ser la evocación nostálgica del cine italiano de los años sesenta.
Y luego tiene a una gran cantidad de nombres propios. Tiene más estrellas en su cartel que en el cielo. Así Nicole Kidman puede cantar como si fuera la reina de los gorgoritos. De esa manera Penélope Cruz puede bailar y hacer de la otra mujer que nunca será la legítima esposa.
Sofía Loren, ya talludita, se presenta pintada como una puerta y hace de la mamma de un creador que está en crisis creativa y no le sale una buena película, un buen musical, le sale una cosa hibrida que es la mezcla de muchas cosas sin ser ninguna.
Y Daniel Day-Lewis es el sufriente de la situación. Nunca nadie había escenificado, puesto la carne, la sangre y el cuerpo a una mente atormentada porque no le salen las cosas, no tiene ideas para proclamarse genio o maestro.
Por eso Nine es una película que no es un no musical. Cosas que pasan
Nine
Director: Rob Marshall
Intérpretes: Daniel Day-Lewis, Marion Cotillard, Penelope Cruz, Nicole Kidman …
USA, 110 min. www.ninelapelicula.es