A través de un comunicado oficial del Ministerio de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, el Gobierno español ha manifestado con firmeza su respuesta a las declaraciones emitidas por la Embajada de Israel. «El Gobierno de España rechaza tajantemente las falsedades vertidas en el comunicado de la Embajada de Israel sobre algunos de sus miembros», y subraya que no acepta «insinuaciones infundadas» sobre ellos.
El comunicado resalta que en una democracia sólida como la de España, los políticos tienen el derecho a «expresar libremente posiciones» en representación de su partido. A pesar de las distintas posturas que puedan surgir a nivel individual, la visión del Gobierno español es unánime en relación a la situación en Oriente Medio.
En particular, España ha expresado sin ambigüedad su postura respecto a los actos de terrorismo cometidos por Hamás. El Gobierno «condena tajante» tales acciones, y reitera su llamado a la «liberación inmediata e incondicional de rehenes», además de reconocer «el derecho de Israel a defenderse dentro de los límites marcados por el Derecho Internacional y el Derecho Internacional Humanitario».
Es esencial resaltar que el Gobierno español ha hecho hincapié en la importancia de separar a la población palestina en general del grupo extremista Hamás. Ha enfatizado la urgencia de proteger a los civiles en Gaza y garantizar que reciban «los suministros básicos indispensables para el bienestar de dicha población».
En un llamamiento al diálogo y a la búsqueda de soluciones pacíficas, España señala que la única estrategia viable para lograr paz y estabilidad duradera en la región es «la solución de dos Estados que coexistan en paz y seguridad», postura que coincide con la aprobada por Naciones Unidas.