martes, abril 30, 2024
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Alimentación Saludable

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La relación entre nutrición y salud se ha estudiado intensamente durante los últimos 50 años. Se ha aceptado universalmente que una dieta óptima, como pilar fundamental dentro de un conjunto de hábitos de vida sanos, contribuye significativamente al mantenimiento del estado de salud de una población. Por el contrario, una dieta de poca calidad favorece el desarrollo de trastornos como la obesidad, dislipemia, hipertensión y la aparición de enfermedades crónicas como la diabetes, enfermedad coronaria, cáncer y desórdenes neurodegenerativos. Así pues, aunque no cabe duda de que en la salud hay también un importante componente genético, nunca me canso de repetir el famoso aforismo de Hipócrates “somos lo que comemos”, siendo en estos momentos más pertinente que nunca.

Es por ello, de la importancia de supone el estar bien alimentados, de lo que depende nuestra salud, por supuesto sin olvidar la realización de ejercicio físico.

Debemos desde ya, tener claro las razones y plantearnos como un objetivo el tener un cuerpo sano, iniciando para ello un cambio en nuestra alimentación, es decir, debemos establecer un plan de alimentación saludable.

Es muy importante establecer unas metas pero nunca de forma rápida y a corto plazo.

¿Cuál es un objetivo a largo plazo? Un objetivo a largo plazo es algo que desea alcanzar de 6 a 12 meses. Por ejemplo, puede ser bajar su presión arterial y / o el colesterol, o alcanzar un peso saludable para su tipo de cuerpo.

¿Cuáles son las metas a corto plazo que le ayudarán a llegar? Metas a corto plazo son las cosas que quiero hacer mañana y al día siguiente. Por ejemplo, usted puede decidir el cambiar a leche semidesnatada o desnatada, o leche de soja en lugar de leche entera, reducir el consumo de comida rápida a una vez por semana, o comer carnes rojas a sólo 3 veces a la semana.

Estos son algunos consejos rápidos sobre los objetivos de comer sano:

En lugar de cambiar su dieta de la noche a la mañana, hacerlo paso a paso. Trate de añadir algo a su dieta en lugar de quitar algo. Agregue los alimentos que usted necesita más, como frutas y verduras. Si usted comienza una dieta quitando alimentos que son altos en grasa o azúcar puede sentirse privado. Esto hará más difícil que usted cambie.

Elegir más de los alimentos sanos con los que usted disfrute. Haga una lista de los alimentos que le gustan, y observe cómo se puede cambiar su preparación para hacerlos más sanos. Por ejemplo, hacer la pizza en casa con bajo contenido de grasa, con queso mozzarella y un montón de verduras frescas.

Escriba sus metas, y cuélguelas donde pueda verlas. La lectura de sus objetivos puede ser un recordatorio útil. No fije metas que implican perder peso rápidamente. Rápida pérdida de peso no es saludable y es difícil de seguir haciéndolo.

Hacer un seguimiento de su progreso le ayuda a ver lo lejos que hemos llegado. También le ayuda a continuar con su plan.

Use un cuaderno, diario o formulario de registro de alimentos para llevar un control de las cosas saludables por hacer. Recurra a este cuando empiecen a dudar de sí mismos o se sienta desalentado.

Preste atención a cómo se siente. ¿Se puede notar alguna diferencia cuando usted está comiendo mejor?, ¿O usted nota alguna diferencia cuando come mal?.

Fíjese si las preferencias de alimentos cambian. A medida que cambiamos lo que comemos, podemos aprender a comer nuevos alimentos. Usted puede encontrar que no le gustan algunos de los alimentos que comía antes de comenzar a hacer cambios en su dieta. Y que ha aprendido a comer nuevos alimentos que usted pensó que no le gustaban.

Procure mirar por encima de cualquier prueba de laboratorio que podría tener si está siguiendo una dieta especial. Usted puede notar mejoras. Las pruebas de azúcar en la sangre le dirá si su dieta está ayudando a controlar su diabetes. Otras pruebas periódicas de sangre pueden medir niveles de colesterol y triglicéridos. Usted puede medir su presión arterial para ver si los cambios en la dieta están mejorando.

Cada vez que cumpla con un objetivo, procure darse a usted mismo una recompensa.

Si tiene ganas de darse por vencido, no se sienta mal consigo mismo. Recuerde que su motivo para querer cambiar, es pensar en el progreso que ha hecho, y procure darse ánimos para seguir adelante. Entonces usted podrá continuar con una alimentación saludable otra vez.

Cuando se encuentre frente a una barrera busque apoyo. Hable con sus familiares y amigos para ver si alguien quiere comer de manera saludable con usted o animarlo a continuar con su esfuerzo.

Cuanto más apoyo tenga, más fácil será cambiar sus hábitos alimenticios. Si los miembros de su familia le dicen que les encanta cómo se está convirtiendo en una persona más sana, probablemente se sentirá motivado para seguir con el buen trabajo.

Intercambie sus hábitos alimenticios con un compañero. Es motivador saber que alguien está compartiendo los mismos objetivos. Esa persona puede recordar lo lejos que han llegado. Y esa persona incluso puede motivar con lo que él o ella ha logrado.

Los amigos y familiares pueden ser un gran recurso. Miembros de la familia pueden comer comidas saludables con usted. Se puede animar diciéndole lo mucho que le admiran por hacer cambios difíciles. Los amigos pueden decirle lo bien que se ve, porque sus hábitos alimenticios han cambiado.

Debe llegar a conseguir el objetivo de comer cinco porciones de frutas y verduras al día. ¡Conviértase en un triunfador!.

Cuidado con los productos que ofrecen un “camino fácil” para perder peso.

Los medios de comunicación buscan lograr titulares que llamen la atención, y en medio de una epidemia de obesidad que afecta a todo el mundo no es raro que algunos titulares aseguren que se han encontrado métodos como Dukan o productos “casi milagrosos” que le permiten a una persona bajar de peso. Un producto llamado “sistema de pérdida de peso Sensa” ha logrado captar titulares en Estados Unidos. Gracias a testimonios de algunas personas famosas, el producto logró gran popularidad, pero solo han mostrado la cara atractiva del producto y no han investigado a fondo para llegar a conocer cuáles son los efectos negativos del uso de este tipo de producto.

En definitiva, cualquier paciente con obesidad o sobrepeso debe consultar a un profesional para determinar cuáles son los productos y los tipos de dietas más adecuados para su caso particular.

 

Vicente Martínez Marín. Ldo. en Farmacia. Asesor de Alimentación del ICOFMA

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