El INE ha hecho públicos este jueves los datos del PIB español relativos al segundo trimestre del año. Como ya había adelantado el pasado 29 de Julio, la economía española sigue creciendo por encima del tres por ciento (3,2%), se reduce respecto al trimestre anterior (3,4%).
La retracción de la demanda, ocho décimas inferior a la del primer trimestre, se debe fundamentalmente a la caída del gasto público: el gasto en consumo final de las Administraciones Públicas presenta una variación anual del 0,1%, lo que supone 2,3 puntos menos que en el trimestre precedente. Por su parte, la inversión registra una tasa de crecimiento del 4,0%, con un descenso de 1,1 puntos respecto al trimestre anterior (5,1%).
La consecuencia de ambos retrocesos es una reducción en el ritmo de creación de empleo. Aunque la economía española ha creado más de 484.000 empleos en un año, el ritmo de creación de puestos de trabajo se desacelera: en términos anuales, el empleo presenta una tasa de crecimiento del 2,9%, tres décimas inferior a la registrada en el trimestre precedente (3,2%). En consecuencia, se reduce en tres décimas la tasa anual de las horas efectivamente trabajadas (del 3,2% al 2,9%).
Estos retrocesos se compensan, parcialmente, con una mejora del sector exterior de la economía española. La demanda exterior presenta una aportación de 0,2 puntos, seis décimas superior a la del trimestre pasado (–0,4 puntos).
Este aumento de la competitividad siguen basado en la devaluación interior basada en la reducción de costes laborales: la variación anual del coste laboral unitario se sitúa este trimestre en el 0,4%, una décima por debajo del deflactor implícito del PIB (0,5%).
Las exportaciones de bienes y servicios aceleran su ritmo de crecimiento y aumentan su tasa en 3 puntos (del 3,8% al 6,8%). En el caso de los bienes, se observa un aumento de 2,7 puntos (del 2,6% al 5,3%). Las exportaciones de servicios no turísticos experimentan un incremento del 13,9%, lo que supone 5,7 puntos más que en el trimestre anterior (8,2%). Por último, el gasto de los no residentes en el territorio económico aumenta en seis décimas su tasa anual (del 4,8% al 5,4%).
El entorno europeo tampoco reacciona especialmente bien a las medidas de política monetaria que centran la respuesta a la crisis. En el segundo trimestre de 2016 la Unión Europea (UE-28) experimenta un crecimiento trimestral del 0,4%, una décima inferior al del trimestre precedente (0,5%). Por su parte, la Eurozona (UEM-19) presenta una variación del 0,3%, en este caso tres décimas menor que la del trimestre anterior (0,6%).
Miguel de la Balsa