El desfase entre ingresos y gastos en la Seguridad Social se acentúa. El Gobierno en funciones ha aprobado retirar 8.700 millones de euros del Fondo de Reserva para pagar las pensiones del mes de julio, que incluye dos mensualidades, la ordinaria y la extraordinaria.
Tras la operación, la denominada ‘hucha de las pensiones’ ha quedado con tan solo 25.176 millones de euros ahorrados. Al actual ritmo de desembolso, los expertos señalan que la hucha de las pensiones podría acabarse incluso antes de 2018, señalan ya a 2017. La cantidad de julio ha superado ampliamente a la mayor retirada anterior, en 2013 que se necesitaron en diciembre 8.000 millones de euros.
La llegada del verano supone el primer gran reto para la Seguridad Social, desembolsar la nómina de junio, la paga extra y la liquidación del IRPF. El año 2012 marcó un antes y un después en este aspecto, desde entonces la Seguridad Social no ha sido capaz de afrontar el mes sin necesitar recurrir al fondo. El año pasado, en julio se necesitaron 6.530 millones aunque se pudo pagar casi la mitad con el excedente de la gestión de las mutuas.
Las pensiones han consumido desde 2012 casi 55.000 millones por encima de lo recaudado a través de la Seguridad Social. Esa cantidad ha minorado la ‘hucha de las pensiones’ hasta reducirlo casi dos tercios de la cantidad de 2012.
El gasto en pensiones de récord en récord
La Seguridad Social destinó 8.491 millones de euros el pasado mes de junio para pagar las pensiones contributivas, un 3,08% más que en el mismo mes de 2015. Se trata del mayor gasto en un mes de junio en la serie histórica y sirve de reflejo de la situación que vive la Seguridad Social.
El número de pensiones avanzó en junio un 1,17% respecto al mismo mes de 2015, hasta un total de 9.402.148 pensiones, nueva cifra récord. Aunque la tasa de crecimiento interanual de junio es de las más bajas en la serie histórica de la última década, se ha acelerado respecto a la de meses anteriores. Hay que remontarse hasta abril de 2015 para encontrar un avance interanual similar.
La cruda realidad
La tasa de paro es superior al 20%. La base de las cotizaciones, en especial los salarios, se han reducido de manera drástica. Ya sea por la devaluación salarial, ya sea por el recambio generacional o ya sea porque a un gran número de personas se le ha acabado la ayuda por desempleo (también pagan cotizaciones) los ingresos se alejan de los gastos que siguen en ascenso.
La realidad se vuelve a imponer. Las pensiones en el actual sistema no son sostenibles y la única pregunta que cabe hacerse es ¿Hasta cuando durará este sistema? La hucha de las pensiones no soportará las tensiones que vive la economía española. La Autoridad Fiscal Independiente (AIReF) señala que se acabará en 2018, algunos expertos creen que será en 2017 tras ver la cantidad que se ha sacado este mes de julio.
Por tanto, en el mejor de los casos son dos años en los que no habrá demasiados cambios estructurales: el paro seguirá alto, los salarios crecerán poco o nada y las pensiones seguirán en ascenso. El próximo Gobierno tiene en las pensiones y su sostenibilidad una de las primeras tareas y también una de las más duras. Son más de nueve millones de votos ¿Quién le quitará el cascabel al gato?
Pedro Ruiz