Este viernes acabamos de conocer una cifra escalofriante: España tiene ya 5.273.000 parados. 5.273.000 personas,-cada una con una historia-, que quieren trabajar y no pueden.
Otra cifra que empuja a la desesperación: Un millón y medio de familias tienen a todos sus miembros en paro.
Pero, como cantaba Freddie Mercury, “the show must go on” y esto es lo que vimos este jueves en la segunda gala de Gran Hermano 12+1. Ya sabemos que el reality por excelencia intenta superarse cada año y busca sorprender a la audiencia. Este año lo ha con seguido.
La semana pasada, la incombustible Mercedes Milá anunciaba que el programa abría una puja en Ebay para quien quisiera pagar por entrar en casa de Guadalix de la Sierra y convertirse en un concursante más. Como contrapunto a semejante idea, la presentadora dejó claro que el dinero que se recaudara, esto es, la puja más alta, se destinaría a Cruz Roja para ayudar a quienes más están sufriendo la crisis.
Como era de esperar, la subasta se disparó y hubo quien colocó la desorbitada cifra de 10 millones de euros por ser concursante de Gran Hermano. Obviamente, según explicaba Milá, la productora del progama, Telecinco y Ebay han puesto medios de controles para saber que quien puje lo haga con cifras razonables y, sobre todo, con liquidez. Hasta aquí, todo queda claro.
Lo asombroso es conocer que una persona, que responde al pseudónimo de ‘Aristidín’, está dispuesta a pagar nada menos que 69.100 euros por formar parte del programa, acceder a la casa de la sierra de Madrid, concursar, y optar al premio. La dirección del reality ya ha anunciado que ‘Aristidín’ tiene que pasar las pruebas médicas pertinentes para convertirse en jugador.
Casi 70.000 euros que, en una situación de crisis devastadora como la que estamos viviendo, nos hacen ver que es cierto que hay gente, -mucha gente-, pasándolo fatal, pero también hay otra para la que la crisis pasa de largo y puede gastarse más de diez millones de las antiguas pesetas sólo en participar en un programa. Como decía aquel antiguo anuncio: “La vida es cuestión de prioridades”.
Vera Soler