Por ello, Illa ha incidido, durante su comparecencia semanal en la Comisión de Sanidad del Congreso, que «no puede haber relajación» en las medidas y ha pedido condenar algunos vídeos que circulan por las redes sociales que muestran acciones de personas que se saltan las normas.
El ministro ha suscrito la actitud de «prudencia» de la Generalitat de Cataluña al pedir que Lleida continúe en la fase 1, cuando «podía progresar» a la 2.
Ha señalado que en este caso, el rebrote de Lleida proviene de una «actitud incívica», un encuentro familiar con un número de personas superior al permitido, si bien ha valorado que se haya detectado «muy precozmente».
También ha valorado la actuación de las autoridades de Murcia que trazaron los contactos estrechos y «tomaron una decisión acertada» al pedir que Totana se quedara en la fase 1 cuando el resto de la Región pasó a la 2.
Estos casos demuestran, según Illa, que los sistemas de detección precoz «funcionan».
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