Este martes se publicará en el BOE el real decreto de convocatoria de las elecciones generales. El 6 de noviembre es la fecha límite que establece la ley para que los partidos y federaciones que quieran presentarse en coalición con otras formaciones lo comuniquen a las juntas electorales. Y aunque hace quince días que Podemos remitió, de manera unilateral, a todos los medios un comunicado en el que daba por rotas las negociaciones con Izquierda Unida para constituir una candidatura de unidad popular, lo cierto es que fuentes de IU confirman a estrelladigital.es que Alberto Garzón aún no se ha dado por vencido.
“El proceso que está siguiendo IU federal no ha acabado todavía. De hecho, aún hay mucha gente que opina que este proceso aún puede terminar en un acuerdo entre Podemos y Garzón”, aseguran dichas fuentes. Tanto es así que “todavía no hay nada preparado de la campaña electoral, excepto pasear a Garzón por lo medios”, insisten desde la formación de izquierdas.
Mientras tanto, IU se descompone a marchas forzadas, y aún nadie en el partido se atreve a aventurar qué ocurrirá el próximo 20 de diciembre con la formación. Su candidato a La Moncloa, Alberto Garzón, apostó todo a su alianza con Podemos en las elecciones generales y ahora se encuentra compuesto y sin siglas.
Claro que aún no ha cerrado la puerta a llegar a un acuerdo ‘in extremis’ con los de Pablo Iglesias, o eso al menos advierten desde su partido. Y esto explicaría dos cosas importantes que están ocurriendo en este momento en la coalición de izquierdas.
En primer lugar, la insistencia en presentarse a las primarias de unas siglas (Ahora en Común) que aún se desconoce si concurrirán a las elecciones generales, puesto que sus propietarios ya han dejado claro que no se enfrentarán a Podemos en unos comicios. Por otra parte, está la negativa del secretario general del PCE, José Luis Centella, a concurrir a las primarias de dicha plataforma. Tal y como publicó estrelladigital.es, uno de los principales escollos en las negociaciones Garzón-Iglesias, más allá de las reticencias de Podemos a concurrir sin sus siglas, era la “mochila” con la que el dirigente de IU acudía a las negociaciones.
«Pillar escaño como sea»
“Garzón ha dejado tirado a Centella y también al secretario general del PC de Madrid, Álvaro Aguilera”, denuncian desde IU. Eso, unido a la intención de colocar a Enrique Santiago como ‘número uno’ por Madrid ha generado una tensión tremenda en el seno interno de la formación. Santiago, que encabeza la candidatura ‘Ahora con Alberto Garzón’, es abogado, asesoró a las FARC y su nombre también ha sido relacionado con los hermanos chileno-cubanos Marambio Rodríguez, condenados por corrupción en Cuba. Según algunos de sus compañeros, su objetivo es claro: “pillar escaño como sea”.
El pasado 12 de octubre, Garzón presentó su lista a las primarias. Y el anuncio de la misma fue una sorpresa absoluta. Nombres como el del exsocialista Alberto Sotillos; la presidenta de Attac España, Sol Sánchez o la feminista Begoña Marugán “no habían sido consensuados”. “Es una lista elegida en una mesa camilla”, denuncian desde algunos sectores de IU.
El resto de candidatos dispuestos a enfrentarse a Garzón tienen hasta el 19 de octubre para inscribirse, aunque como ya ocurrió en las primarias de IU, es muy probable que la de Garzón sea la opción ganadora. Las votaciones se desarrollarán entre el 22 y el 26 de octubre, pero hasta el 29 no se conocerá al ganador. No obstante, fuentes internas de la formación califican de “formalismo” este proceso, puesto que la intención de IU federal (que al fin y al cabo es la que “paga” estas primarias) es que Alberto Garzón sea el cabeza de lista, el “único candidato al que va a apoyar”.
Las incógnitas
Pasado este trámite, aún quedan importantes incógnitas por despejar. Si al final Podemos y Garzón no llegan a un acuerdo ‘in extremis’, el diputado malagueño tendrá que decidir con qué nombre se registrará para concurrir a las elecciones (cuyo plazo concluye el 16 de noviembre), planificar una campaña desde cero y decidir por qué circunscripción se presentará.
Por el momento, las hipótesis que se manejan en IU es que si finalmente no hay acuerdo con Podemos, Garzón podría optar por la marca Unidad Popular en Común, que registró el pasado 4 de septiembre el despacho de abogados Boye-Elbal. El bufete ya ha anunciado que está dispuesto a cederla al ganador de las primarias de Ahora en Común. La circunscripción por la que se presentará también es un misterio, pero en IU no descartan que vuelva a ser por Málaga, la provincia que le abrió las puertas del Congreso en 2011 y donde hoy concentra su principal apoyo.