Tras asegurar que ella no tiene un plan de pensiones privado pero respeta «mucho a quien lo quiera tener», Cospedal ha comentado que no cree que lo dicho por Corbacho sea «la mejor frase» para un ministro de Trabajo que lo que tiene que proporcionar es tranquilidad sobre el sistema de pensiones y trabajar para asegurar su viabilidad.
En este sentido, ha añadido que parece que Corbacho «tampoco es muy aficionado» a incentivar la contratación que aseguraría la viabilidad del sistema público de pensiones.
Por tanto, la secretaria general popular ha considerado que Corbacho «debería tener más cuidado con lo que dice» porque sus declaraciones se «traducen en falta de confianza y falta de credibilidad» en el titular de Trabajo.
Preguntada por el «rifirrafe» que ayer protagonizó en el Senado con Corbacho, al preguntar al Ministro por el desempleo femenino, Cospedal ha dicho que se está «acostumbrando» a que los ministros socialistas en lugar de contestar a sus preguntas la insulten.
«Es una especie de consigna que últimamente tiene el PSOE, en vez de contestar lo que hay que hacer es insultar» y «crear un estereotipo acerca de cómo es una persona», ha añadido Cospedal, quien cree que esto «tiene bastante que ver» con que es la candidata del PP para las próximas elecciones autonómicas en Castilla-La Mancha.
Según la secretaria popular, esta forma de contestar, insultando al que pregunta, significa que «las cosas al ministro no le van muy bien» y esto «le perjudica bastante» como responsable de Trabajo.
Por su parte, la vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, afirmó hoy que tiene un plan de pensiones privado como complemento a su futura pensión, aunque precisó que éste no es sustitutivo de la pensión pública. «Creo que los planes de pensiones privados son una opción legítima, son muchos los ciudadanos que los utilizan», subrayó la vicepresidenta primera, en declaraciones a RNE.
Sin embargo, De la Vega destacó el compromiso del Gobierno por «mantener, reforzar y garantizar» de cara al futuro el sistema público de pensiones. «Es un compromiso total e irrenunciable, más allá de que cualquier persona esté en su legítimo derecho de hacerse un plan», señaló.
En este sentido, insistió en que el Ejecutivo está trabajando para seguir manteniendo el sistema de pensiones públicas para las futuras generaciones y para que todos los ciudadanos puedan acceder de forma «solidaria y equitativa» a las prestaciones sociales.
«Este es el Gobierno que más ha subido las pensiones mínimas, casi el 32% en seis años, y que más prestaciones sociales ha impulsado, reconocido y mantenido incluso en sistuaciones de dificultad económica», dijo.