La residencia de la nueva Ciudad Deportiva del Real Madrid se inauguró en 2014. Carlo Ancelotti era el entrenador del primer equipo entonces, pero el italiano se encontró unas instalaciones al gusto de su predecesor, José Mourinho. El portugués firmó una renovación de su contrato en 2012, para entrenar al club hasta 2016, pero los malos resultados hicieron que saliera del equipo en 2013.
Mourinho era un entrenador “de larga duración” y por eso tuvo plenos poderes a la hora de tomar decisiones importantes. Hasta ahora, se sabía que influyó en el diseño de la habitación del primer entrenador, pero no se conocían los motivos que le llevaron a meterse en este asunto.
El edificio diseñado por el estudio de arquitectos Lamela estaba concebido en un primer momento para contar con 34 habitaciones exactamente iguales en la primera planta. Estas estancias están destinadas a los jugadores de la primera plantilla y a los miembros más importantes del equipo técnico, aunque no todas están ocupadas.
Por eso, Mourinho puso el grito en el cielo al ver que su habitación era igual que el resto y pidió que se la ampliaran, según explican empleados del club. Todas las habitaciones cuentan con un pequeño despacho, pero con eso a Mou no le valía, aunque el verdadero motivo que le empujó a pedir un cambio era el de reforzar su autoridad como entrenador. Su estancia cuenta con dos baños y todo el mundo tenía que saber que era más grande que la del resto, según explican estas fuentes.
Servicio 24 horas para los jugadores
En cualquier caso, ‘Mou’ no llegó a estrenar la residencia y Carlo Ancelotti fue el primero que la ocupó, junto a su esposa, antes de la inauguración oficial. El italiano pasó sus primeros días allí, mientras buscaba casa en Madrid. No hubo problema para cambiar la placa de la puerta en la que figura el nombre de los jugadores y de los entrenadores porque tienen un bonito sistema de quita y pon, muy útil en caso de destitución y relevo.
‘The Special One’ no pudo disfrutar de la sala de cine de las instalaciones, ni se pudo tirar ni una vez a la piscina de ocio (los jugadores tienen otra para los tratamientos de fisioterapia). Por su puesto, tampoco vio la inauguración del nuevo pabellón de baloncesto ni la residencia de la cantera. Su habitación ahora la ocupa Zinedine Zidane y de momento tiene ‘pegamento’ para rato en su placa.
Tampoco vio desde su ventana los dos parkings que puso el equipo a disposición de la plantilla, el más cercano a la puerta para los que van a entrenar con su Audi, el coche que están obligados a llevar los jugadores, aunque pocos cumplen esa norma. Y el otro aparcamiento destinado a vehículos de otras marcas, el que siempre está más poblado. Los jugadores pueden acudir las 24 horas del día a su habitación porque tienen un servicio de una empresa hotelera contratada los 365 días, aunque raro es el que acude allí a dormir porque en principio está prohibido entrar a las habitaciones con compañía.
Los dormitorios de la cantera son dobles o triples y tienen baños mucho más altos para los jugadores de baloncesto. De las 120 hectáreas que tiene el Real Madrid en Valdebebas solo ha construido en 40 de ellas, aunque la obra no para y lo próximo en inaugurarse serán unas oficinas para trasladar allí a trabajadores del Bernabéu.
Felipe Poza