Keylor, inmenso (9). Tuvo varias intervenciones decisivas en jugadas que parecían goles cantados. No estuvo fino a la hora atrapar los balones ni en el juego con los pies, pero esos detalles se convierten en apartados menores, cuando un portero lo para todo.
Danilo, con altibajos (5). Estuvo firme en la defensa de su banda, aunque algunas de las jugadas más peligrosas del Levante llegaron por allí. En ataque no brilló en los centros.
Marcelo, un puñal (9). No tuvo ningún problema atrás y seleccionó con mucho criterio sus subidas. Marcó un gol, se entendió muy bien con Cristiano y metió muchos centros con veneno.
Nacho, correcto (5). Estuvo muy cómodo con el balón en los pies en la distribución, aunque sufrió un poco para fijar las marcas.
Varane, en su nivel (7). Como siempre, no cometió ni un solo fallo reseñable y superó en velocidad a todo el que se atrevió a retarle.
Casemiro, equilibrio sin más (5). Chocó y dio algo de leña a los futbolistas del Levante, pero no se involucró en el juego de su equipo como en otras ocasiones. Se crece en los partidos grandes y el Levante no le debía motivar demasiado.
Kroos, algo mejor (6). Robó el balón que terminó en el segundo gol del partido. Llegó a zonas de remate con asiduidad, aunque sigue sin ser el mismo en la circulación del balón.
Kovacic, con más garra que fútbol (6). Se metió una vez más al Bernabéu en el bolsillo porque no escatimó en esfuerzo, pero parece que brilla más cuando juega pocos minutos. No tuvo la explosividad que muestra cuando sale desde el banquillo.
Isco, más vistoso que práctico (6). Hizo sombreritos y ruletas de crack en el centro del campo, pero se durmió con el balón en el área. Dio la sensación de que jugaba más de cara a la galería que para ayudar a su equipo en el apartado ofensivo.
Bale, sin luz (5). Firmó una única buena combinación con Cristiano y un remate de cabeza en los 45 minutos que tuvo. Benítez le dio descanso en la segunda parte.
Cristiano Ronaldo, en una de sus mejores versiones (8). Asistió y marcó. No se desesperó en ningún momento, aunque también pudo hacer algún gol más.
Rafa Benítez, más de lo mismo (6). Con tantos lesionados, no tiene opciones para probar cosas nuevas. Su equipo es reconocible en lo defensivo, pero falta continuidad en el juego ofensivo y más chispa en tres cuartos de campo.
Lucas Vázquez, otro día más en la oficina (5). Tuvo otra oportunidad, pero se limitó a cumplir sin arriesgar. Debe pedir más el balón o será siempre un jugador para completar plantilla.
Jesé, resurrección (8). Jugó muy poco tiempo, pero no lo pudo aprovechar más. Marcó un gol bellísimo y metió varios centros con auténtico veneno.
Marcos Llorente solo tuvo los minutos de la basura (-)