Pedraz abre diligencias por una denuncia que acusa a Ferreras, Casals y Villarejo de integrar un “clan mafioso” para fabricar pruebas falsas

El magistrado Santiago Pedraz ha dado el primer paso para esclarecer una presunta trama criminal que salpica a figuras clave del ecosistema mediático, político y policial español. En un auto dictado el 27 de junio de 2025, el titular del Juzgado Central de Instrucción número 5 de la Audiencia Nacional ordenó la apertura de diligencias previas tras recibir una denuncia presentada por Javier Pérez Dolset, empresario del sector tecnológico, quien sostiene que fue víctima de una campaña coordinada de destrucción personal y profesional basada en pruebas fabricadas.
La denuncia (a la que ha tenido acceso ESTRELLA DIGITAL) no se limita a acusaciones genéricas. Identifica con nombres y roles concretos a los supuestos miembros de lo que denomina “una organización criminal con carácter permanente y un evidente reparto de funciones”. Entre los señalados figuran el excomisario José Manuel Villarejo, el periodista Antonio García Ferreras, el empresario Mauricio Casals, el exministro Jorge Fernández Díaz, el exDAO Eugenio Pino, el financiero Adrián de la Joya, así como los grupos empresariales Atresmedia y Planeta .
El auto judicial firmado por Pedraz acuerda incoar diligencias y trasladar el caso al Ministerio Fiscal para informe, al considerar que los hechos denunciados “presentan características que hacen presumir la posible existencia de una infracción penal”, conforme a los artículos 774 y 777 de la Ley de Enjuiciamiento Criminal.
De las sospechas a las pruebas: la denuncia habla de “un clan mafioso con división de tareas”
El escrito, de 31 páginas, sostiene que la red operaba como una estructura organizada “con fines delictivos, bajo una jerarquía clara y una estrategia común”, utilizando sus posiciones de poder en medios, cuerpos policiales y empresas para crear pruebas falsas, filtrar información interesada y manipular procedimientos judiciales.
Uno de los aspectos más llamativos es el uso de expresiones como “mafia” o “clan” por parte de los propios denunciados. En una grabación incorporada a la denuncia, Antonio García Ferreras afirma: “Esto es una mafia”, a lo que Casals replica: “Por eso lo digo, es un clan”. El denunciante interpreta estas afirmaciones como una prueba de autoconciencia organizativa.
Entre las pruebas se incluyen transcripciones de conversaciones entre Villarejo, Ferreras, Casals y otros, en las que se alude a operaciones de intoxicación mediática mediante documentos bancarios falsificados para incriminar a Pérez Dolset, Pablo Iglesias, Xavier Trias o Juan Luis Cebrián. En uno de esos audios, Villarejo llega a asegurar que "Rajoy está al tanto de todo" .
Qué delitos se investigan y a quiénes afecta
La denuncia (presentada por la procuradora Guadalupe Hernández en representación de Pérez Dolset) atribuye a los acusados la presunta comisión de los delitos de organización criminal, cohecho, falsedad documental (pública y privada), tráfico de influencias, denuncia falsa, revelación de secretos, encubrimiento y blanqueo de capitales .
Según el escrito, la red habría operado con una dinámica mafiosa en la que cada actor asumía una función: Villarejo como ejecutor, Ferreras como amplificador mediático, Casals como coordinador empresarial, De la Joya como intermediario económico, y altos mandos policiales como operadores internos del sistema judicial y administrativo. El objetivo: eliminar a “enemigos” del grupo y favorecer a aliados.
Además, se pide expresamente al juez que cite a declarar como testigos a figuras clave como la periodista Patricia López, el fiscal José Grinda, y el propio exministro Jorge Fernández Díaz.
Ferreras, Villarejo, Casals y A3Media: nombres propios en el foco
La denuncia sitúa a Antonio García Ferreras en el centro de la operación de difusión de informaciones falsas. Lo acusa de haber difundido en su programa datos sobre una supuesta cuenta de Pérez Dolset en Panamá con 101 millones de dólares, pese a que el documento bancario era falso. También menciona expresamente el caso de Pablo Iglesias y la falsa cuenta en Granadinas, que Ferreras reconoció en una grabación haber difundido pese a saber que era “demasiado burdo”.
En cuanto a Mauricio Casals, presidente de La Razón y vicepresidente de Atresmedia, se le atribuye un rol directivo en la estrategia global del grupo. A Atresmedia y Grupo Planeta se les imputa responsabilidad penal como personas jurídicas por haber permitido, supuestamente, que sus directivos participaran en la difusión de documentos falsos sin mecanismos de control o verificación.
La información, adelantada en primicia este 2 de julio por la periodista Patricia López en Diario Red, en un artículo que revela el contenido esencial del auto del juez Pedraz.