El pasado es prólogo. Al tiempo que en Moscú anunciaban la retirada de la momia de Lenin para ser restaurada, en otros países de Europa renacía con fuerza el ideario que dio sentido a la vida de Wladimir Ilich Uliánov, el verdadero nombre del titular del visitado mausoleo de la Plaza Roja.
La momia se renueva y el ideario se actualiza. Xiriza en Grecia y Podemos en España son los dos ejemplos más recientes de movimientos que han sido capaces de actualizar el ideario comunista utilizando como herramienta el análisis clásico de los discípulo de Marx. Como es sabido, Carl Marx -a ratos filósofo, a ratos periodista y siempre animal político- definió en temprana hora que el camino más corto para llegar la meta del socialismo -antítesis del capitalismo- pasaba por la democracia entendida como etapa de tránsito hasta alcanzar el poder. Poder popular. Aprovechar las contradicciones del régimen democrático para alcanzar el poder. En ése largo y en ocasiones dramático recorrido, el ideal marxista topó con un antagonista surgida de sus propias filas: la socialdemocracia. Un enemigo a batir tras acusarlo de actuar como «gerente» de los intereses del capitalismo. Caído El Muro y desaparecida la Unión Soviética, en la Europa occidental, el hundimiento y consecuente descrédito del ideario comunista no fue repudiado y descatalogado en igual medida por la ciudadanía. En Francia, «El Libro negro del comunismo» fue un «best seller», mientras que en España pasó inadvertido. Cada país tiene su Historia y en España el Partido Comunista, durante la Transición, fue pieza clave en la operación para restaurar la democracia. Algunos de sus líderes (Marcelino Camacho, Sánchez Montero, etc. ) habían pasado largos años en las cárceles franquistas. En Grecia la hoguera de la guerra civil -que terminó en 1950 con el triunfo de la derecha nacionalista- dejó un gran rescoldo entre los partidarios del comunismo. Identificando a la crisis económica como catalizador y al «austericidio» como detonante, no se puede entender el auge en Grecia de Xiriza y aquí el de Podemos sin concluir que estamos ante uno de los escenarios previstos por Lenin cuando describía que además de los capitalistas, el «enemigo oculto», era la socialdemocracia. Y en eso están. En Grecia fagocitaron al PASOK, aquí van a por el PSOE. Todo un símbolo la restauración de la momia.
Fermín Bocos