Gary Roland Welch, un preso condenado por una muerte a puñaladas perpetrada en 1994, se convirtió el jueves en el primero reo ejecutado en Estados Unidos en lo que va de año. Las autoridades de Oklahoma utilizaron la inyección letal para cumplir la pena de muerte a la que fue sentenciado por matar a Robert Dean Hardcastle durante una pelea relacionada con temas de droga.
El portavoz de la prisión de McAlester, Jerry Massie, confirmó que el reo murió a las 18.10 horas. Welch ya trató de quitarse la vida hace tres semanas cortándose el cuello, según los funcionarios de prisiones. Welch, de 49 años, basó su defensa en explicar que actuó en defensa propia y que el fallecido fue quien inició el enfrentamiento en una vivienda de la ciudad de Miami donde se traficaba con drogas. La Junta de Apelaciones estatal negó la clemencia solicitada por el reo por tres votos contra dos.
Oklahoma realizó en 2011 dos ejecuciones, ambas en las primeras semanas del año. El Centro de Información para la Pena de Muerte (DPIC, por ss siglas en inglés) recoge que, en todo el país, el número de ajusticiamientos cayó en 2011 hasta los 43, por debajo de los 46 de 2010 y los 52 de 2009. Desde la reinstauración de esta pena en 1976 han muerto ejecutadas 1.278 personas.