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Una niña de doce años se suicida para donar los órganos a su familia, pero la incineran

En un pequeño pueblo de la India, llamado Jhorpara, una niña llamada Mumpy se suicidó para donar los órganos a su padre y a su hermano. Mumpy Sarkar, de doce años, había escuchado en casa que los varones de su familia podrían dejar de estar inválidos gracias a los transplantes, pero la familia no podía permitirse el coste.

Viendo lo insostenible de la situación en su casa, ideó un plan: suicidarse y donar a su padre sus ojos, y su riñón a su hermano. La niña le confesó sus intenciones a su hermana Monica, pero ésta creyó que se trataba de una idea infantil, y no lo tomó en serio.

Mumpy fue tomando poco a poco 'Thiodan', un pesticida, y la niña empezó a enfermar. Avisó a su padre diciendo que había soñado que alguien la estaba envenenando, por lo que fue llevada al hospital. Según los médicos, no podían hacer nada por ella, y finalmente murió.

Sin embargo, la muerte de la niña no fue el fin de la tragedia. Mumpy había escrito una nota explicando sus intenciones, y el deseo de que sus órganos pudiesen salvar la vida de su padre y su hermano. Pero la nota fue encontrada una vez celebrado el funeral siguiendo el rito hindú: había sido incinerada y no había órganos que pudiesen transplantar. Según su padre, "fue demasiado tarde para comprender los sentimientos de una niña muy sensible".

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