Irán promete una “respuesta amarga y dolorosa” tras el ataque israelí a instalaciones nucleares
Israel ha lanzado un ataque aéreo preventivo sobre Irán, en una operación que ha dejado altos cargos militares y científicos nucleares iraníes muertos
Israel ha ejecutado un bombardeo de gran escala contra instalaciones de Irán, especialmente relacionadas con su programa nuclear. Según fuentes oficiales, el operativo incluyó el despliegue de 200 cazas que atacaron un centenar de objetivos, entre ellos la planta de enriquecimiento de Natanz, epicentro del programa atómico iraní, y otros puntos estratégicos en Teherán y otras regiones. Entre las víctimas se encuentran altos mandos como el jefe del Estado Mayor iraní, Mohamad Hosein Baqerí, y el comandante de la Guardia Revolucionaria, Hossein Salamí.
“Un punto de no retorno”
El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, ha justificado la ofensiva como una acción “necesaria” para prevenir una amenaza “existencial” y ha confirmado que se trata solo del comienzo. “No permitiremos ser víctimas de un holocausto nuclear”, declaró. La operación ha sido bautizada como “El león que se alza”.
Still think the Iranian Regime will stop at Israel? Let them prove you wrong: pic.twitter.com/96c7oROorf
— Israel Defense Forces (@IDF) June 13, 2025
El Ejército israelí ha afirmado que el objetivo era neutralizar la capacidad iraní de fabricar armas nucleares en un corto plazo, una amenaza que consideran inminente. El Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) ha confirmado que la planta de Natanz fue impactada, aunque sin incremento de los niveles de radiación.
Moments ago, Israel launched Operation “Rising Lion”, a targeted military operation to roll back the Iranian threat to Israel's very survival.
This operation will continue for as many days as it takes to remove this threat.
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Statement by Prime Minister Benjamin Netanyahu: pic.twitter.com/XgUTy90g1S— Benjamin Netanyahu - בנימין נתניהו (@netanyahu) June 13, 2025
Irán prepara su respuesta
Desde Teherán, el líder supremo Ali Jameneí ha prometido una “respuesta amarga y dolorosa” y el régimen ha declarado el estado de alerta máxima. La Guardia Revolucionaria ha advertido que Israel “pagará un alto precio”, mientras que se prepara una represalia que podría implicar ataques con drones o misiles.
El Ministerio de Exteriores iraní ha invocado el artículo 51 de la Carta de la ONU, justificando una respuesta armada como legítima defensa. En paralelo, varios aeropuertos iraníes han sido cerrados y las fuerzas armadas movilizadas.
EE.UU. se desmarca y llama a la contención
Estados Unidos ha negado cualquier participación en el ataque israelí. El secretario de Estado, Marco Rubio, ha afirmado que Washington no estuvo involucrado y ha pedido a Teherán que evite cualquier represalia contra personal o intereses estadounidenses. El presidente Trump ha convocado una reunión de emergencia del Consejo de Seguridad Nacional para evaluar el impacto del ataque y sus consecuencias geopolíticas.
Statement from Secretary of State Marco Rubio
— The White House (@WhiteHouse) June 13, 2025
“Tonight, Israel took unilateral action against Iran. We are not involved in strikes against Iran and our top priority is protecting American forces in the region. Israel advised us that they believe this action was necessary for its… pic.twitter.com/5FFesh3dkF
Condena internacional
Numerosos países han reaccionado con preocupación. Japón ha condenado el ataque israelí, calificándolo de “grave error que agrava la situación”. Cuba y Venezuela también han criticado duramente a Israel, mientras que Egipto y Jordania han cerrado su espacio aéreo como medida preventiva.
Hamás ha calificado la ofensiva como una “peligrosa escalada” que pone en jaque la estabilidad regional, al tiempo que reafirma su apoyo a Irán. La ONU ha pedido “máxima contención” y ha advertido que un conflicto abierto sería desastroso.
Este ataque marca un nuevo escalafón en la creciente confrontación entre Israel e Irán, que se intensifica desde el inicio de la guerra en Gaza en octubre de 2023. Aunque Israel había llevado a cabo operaciones en Siria, Líbano y Yemen, la ofensiva directa sobre territorio iraní, y especialmente sobre su infraestructura nuclear, representa un cambio cualitativo de enorme gravedad.
