Falsificaban documentación para poder retirar los cuerpos de hospitales y residencias para venderlos posteriormente a universidades para su estudio por 1.200 euros cada cadáver
Se trata del delincuente más buscado y peligroso de Países Bajos, implicado en numerosas investigaciones policiales al ejercer como punto de conexión en España de diversas organizaciones de narcotraficantes
Además se les imputa un delito contra la salud pública ya que arrojaban al campo vertidos químicos con el material sobrante de la transformación de la droga
El magistrado entiende que no existe revelación de secretos, pues actuó “de acuerdo con su conciencia y ante el temor de haber sido contagiada ella misma y quién sabe cuántas mujeres más”
Uno de los detenidos gestionó la compra de cámaras térmicas para su exportación ilegal a Libia, incurriendo en un delito de contrabando de género prohibido