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Una "cachonda" para Daniel Folla

'Adán y Eva' sigue superándose. Si apenas nos hemos repuesto del "dragón negro" de Coman ahora ya nos adelantan que la próxima semana tendremos el gusto de conocer a Daniel Folla. El hombre que sólo con presentarse ya garantiza una relación sexual intentará conquistar a Raquel Meritxell, cuyo nombre lo único que invoca es una tienda de bisutería. 

La versión española de aquel inolvidable Greg Focker al que dio vida Ben Stiller en 'Los padres de él' no sólo provocará la risa de su Julieta particular y, es de esperar, del respetable, sino que también levantará los más bajos instintos de ella, hasta el punto de pasar de ser modosita a una cachonda, como ella misma reconocerá.

Y es que la tal Raquel caminará hacia el inicial encuentro con su pareja con las manos tapándose su sexo, lo cual no sé si estará penado en el contrato que firmó con la productora, y terminará poniéndose cachonda por cualquier cosa. 

 

"Si me tocas el pelo me pongo cachonda", "ver encadenado a Paco, me pone cachonda"... ¿Qué quién es Paco? Ah, sí, es que para sorprendernos una semana más el programa no sólo contará con el tal Daniel ese que dice que Folla sino también con el susodicho Paco. Vamos, que el trío en esta ocasión tendrá mayoría masculina, quizás para que no decaiga la "fiesta del pene" después del paso por el concurso de Coman.

Frases como "quieres que te lo haga todo", lanzadas así, como el que no quiere la cosa, sin ton ni son, pondrán más caliente que el palo de un churrero a una moza sorprendida no sólo por la cantidad sino por la calidad, como muy bien dejó patente con su expresión "¡guau, tremendo macho!" para definir a uno de los candidatos a ser su futura pareja.

Palmas con las orejas estoy dando ya no sólo por esta entrega sino por las que puedan venir a continuación. ¿Le llevarán un harén de mujeres o de hombres a un concursante? ¿Habrá transexuales para heteros? ¿Traerán animales y se pondrá de moda la zoofilia que tanto me gusta? ¿Se mostrará un día sólo primeros planos de las partes nobles de los participantes, en vez de tantas imágenes de espaldas o de perfil? 

Una ya se espera cualquier cosa de un programa que ha creado un antes y un después en la historia televisiva. Ahora sólo faltaría que esta nueva ola de "destape" a la que asistimos calase tanto como la que llegó en la primera época de nuestra democracia actual y que lo raro sea ver a alguien vestido en televisión. De ser así, y como ocurrió con la sustitución del cine mudo por el sonoro, más de uno tendría que hacer las maletas y dedicarse a otra cosa. Aunque sólo sea por no hacer el ridículo.

 

La mosca