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Interceptada una narcolancha con 3.250 litros de gasolina frente a la costa de Huelva

Dos detenidos cuando abastecían de combustible a alta mar una embarcación dedicada al narcotráfico. La lancha rápida, de 1.200 caballos, fue embestida por otra en plena persecución. La operación conjunta de Policía Nacional y Vigilancia Aduanera desmantela un nuevo caso de “petaqueo” en aguas onubenses

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Agentes de la Policía Nacional y de Vigilancia Aduanera de la Agencia Tributaria han intervenido una narcolancha con 130 garrafas de gasolina, que transportaba 3.250 litros de combustible en aguas del Golfo de Cádiz, a unas 10 millas al sur de la costa de Huelva. Los dos tripulantes han sido detenidos y enviados a prisión provisional por orden judicial.

El dispositivo, desarrollado durante la madrugada del pasado 31 de mayo, tenía como objetivo vigilar las embarcaciones recreativas utilizadas para el suministro clandestino de gasolina —conocido como “petaqueo”— a las lanchas rápidas empleadas en el tráfico de drogas.

Abastecimiento nocturno y persecución en alta mar

La patrullera Alcatraz fue la primera en detectar la operación en curso: una embarcación tipo patera se aproximaba a una “goma” para entregarle garrafas de combustible. De inmediato, el Fénix II, patrullero de intervención rápida, se dirigió al lugar para interceptar a los implicados.

Durante el abordaje, la lancha de los narcotraficantes trató de embestir al patrullero para evitar la interceptación, sin éxito. Los agentes lograron neutralizar la acción y detuvieron a los dos ocupantes de la embarcación de alta velocidad, equipada con radar y teléfono satelital para comunicaciones seguras.

Embarcación incautada y prisión para los arrestados

La narcolancha intervenida tiene 14 metros de eslora y una potencia de 1.200 caballos, características comunes en las lanchas rápidas que se utilizan para los alijos de droga desde Marruecos hasta las costas andaluzas.

A los detenidos se les imputa un delito de contrabando y otro contra la seguridad colectiva. El juzgado encargado del caso ha decretado su ingreso en prisión provisional, mientras continúa la investigación para desarticular la red logística que opera en la zona y detectar a otros posibles implicados.

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