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Un influencer alemán encuentra sus zapatillas donadas a Cruz Roja en un mercado de Sarajevo tras rastrearlas con un AirTag

El experimento viral de Moe.Haa ha puesto en el punto de mira el destino real de las donaciones depositadas en los contenedores de Cruz Roja

El aleman Moe Haa y sus zapatillas
El aleman Moe Haa y sus zapatillas

Los contenedores de ropa de la Cruz Roja, presentes en la mayoría de ciudades europeas, están pensados para dar una segunda vida a prendas que ya no usamos y ayudar a quienes más lo necesitan. Sin embargo, un vídeo viral ha sembrado dudas sobre el verdadero recorrido de estas donaciones.

El protagonista es Moe.Haa, un influencer alemán que decidió realizar un experimento: introdujo un AirTag dentro de unas zapatillas que donó a uno de estos contenedores y documentó todo el proceso en sus redes sociales. Su objetivo era comprobar si, como se presupone, las prendas depositadas en estos puntos de recogida acaban siendo entregadas a personas en situación de vulnerabilidad.

De Múnich a Sarajevo: el inesperado viaje de unas zapatillas

Lo que comenzó como una curiosidad terminó en una sorprendente odisea. Las zapatillas salieron de Múnich y recorrieron miles de kilómetros atravesando Austria, Eslovenia, Croacia y, finalmente, Bosnia y Herzegovina. Allí, en Sarajevo, el localizador dejó de moverse.

Intrigado, Moe.Haa decidió viajar hasta la capital bosnia. Tras varias horas por carretera, llegó al lugar donde su teléfono marcaba la ubicación final. Lo que encontró fue un mercado de ropa de segunda mano donde, para su asombro, localizó sus propias zapatillas, ahora expuestas en una estantería y etiquetadas con un precio de 10 euros.

Sin revelar la razón de su visita, compró el calzado y preguntó a las dependientas por su procedencia. Según explicó la empleada, eran importaciones procedentes de Alemania, aunque negó que provinieran de donaciones.

Cruz Roja responde: solo el 10 % de la ropa donada va directamente a necesitados

La repercusión del vídeo fue tal que la Cruz Roja emitió un comunicado en TikTok explicando el proceso que sigue con las 70.000 a 80.000 toneladas de ropa que recibe anualmente:

  • 10 % se entrega directamente a personas necesitadas.
  • 50 % se recicla como materia prima por estar en mal estado.
  • 40 % se vende en tiendas de segunda mano o a través de empresas especializadas.

Según la organización, los ingresos generados por la venta de ropa se destinan a financiar proyectos de ayuda humanitaria. También añadieron que están trabajando en mejorar la transparencia de todo el proceso, y que los nuevos contenedores ya informan claramente del destino de las prendas donadas.

El mensaje del influencer: "Ayuda directamente"

Aunque agradeció la explicación de la Cruz Roja, Moe.Haa concluyó su vídeo con una reflexión:

“Si de verdad quieres ayudar directamente con tu ropa, no la dones anónimamente a través de las cajas de donaciones. Entrégala directamente a la gente, ya sea en la calle, en albergues o en grupos comunitarios.”

Su experimento, más allá del debate sobre el destino de las donaciones, ha abierto una conversación sobre cómo y a quién donamos, y ha impulsado a muchos usuarios a replantearse sus formas de colaborar con causas solidarias.

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