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SmartWig, la peluca que podrá guiar a los ciegos

Si eres calvo o tienes dificultades a la hora de orientarte, aquí tienes la solución. La nueva peluca “inteligente” de Sony permite, además de rejuvenecer unos años, transmitir coordenadas de cualquier destino mediante GPS. Es decir, te guía en tu trayecto. ¿Cómo? Introduces el destino; y la peluca, mediante vibraciones en el cráneo, te indica hacia que lado debes dirigirte (apuntan los desarrolladores, que el cerebro es una parte del cuerpo extremadamente sensible, por lo que es ahí donde mejor se sienten las vibraciones). Ideal como sustituto de los bastones para invidentes.

Pero esto no es todo señores, ya que además, gracias a sus sensores, esta patente del gigante nipón sirve también para medir la temperatura y la presión sanguínea del usuario (abriendo así la posibilidad de ofrecer aplicaciones para el control de la salud) o incluso grabar sonidos e imágenes que su portador podrá volver a ver después en una pantalla.

Pese a que la polémica patente se dio a conocer hace dos meses, al encontrarse en fase experimental todavía no existe un precio orientativo para adquirirla. Lo que sí sabemos es, que se comercializará durante este año en llamativos colores, e incluirá una luz láser, cámara, micrófono y conexión GPS, Wi-Fi y Bluetooth.

Según apuntaron sus desarrolladores, el aparato se haría de lana, cabello humano, pelo de caballo, plumas o algún material sintético. Y entre sus mechones irá integrado un circuito, que se comunica con otros dispositivos de manera inalámbrica. Además está previsto que la peluca se conecte con dispositivos móviles (por ejemplo, un Smartphone), para notificar al usuario sobre llamadas entrantes o nuevos correos recibidos.

Pero ahora viene lo mejor: otra variante de este prototipo incluiría captadores de señales eléctricas emitidas por el cerebro, que podría convertir potencialmente en órdenes. Alucinante oigan, y ¡todo esto en una peluca!. Eso sí, nada que ver con las que te venden en las tiendas de los queridos amigos orientales. Esta es de las buenas.

En cualquier caso, no se sorprendan demasiado porque esto ya lo dijo el altísimo en su día ¿no?: “Entonces los ciegos verán y los sordos oirán”. Pues oigan, aquí esta el medio.

María Llagüerri