El presidente permanente del Consejo de la Unión Europea, Herman Van Rompuy, y el jefe del Ejecutivo comunitario, José Manuel Durao Barroso, han remitido una carta a los dirigentes del G-20 para pedir una mayor implicación de este foro en las medidas para la recuperación ante la actual crisis. El grupo se reunirá los próximos 3 y 4 de noviembre en Cannes, Francia.
«Las perspectivas para Cannes son altas. Por la credibilidad del G-20 y cada uno de sus miembros. En la UE hemos demostrado nuestro compromiso haciendo todo lo necesario par restablecer la confianza y el crecimiento. Esperamos que las conversaciones de la semana próxima con nuestros socios del G-20 sean muy constructivas», han señalado ambos dirigentes en la carta, publicada este domingo.
Barroso y Van Rompuy piden asimismo un espíritu colectivo renovado para el G-20, «un espíritu de responsabilidad y propósitos comunes». En ese sentido, señalan que el objetivo de la cumbre debe ser «ayudar a restablece4r la confianza global, apoyar un crecimiento sostenible y la creación de empleo y mantener la estabilidad financiera».
La misiva insiste en las medidas adoptadas por la UE para atajar la crisis y retomar el crecimiento. «Aplicaremos estas medidas con rigurosidad y en el momento adecuado y confiamos en que contribuirán a la rápida resolución de la crisis. Sin embargo, aunque en Europa hagamos nuestra parte, ello no garantiza por sí solo la recuperación global y un crecimiento reequilibrado», advierten.