Reilly y Sebastián anuncian un plan de Opel con un futuro prometedor para España
Sebastián reveló también que pidió a Reilly una apuesta decidida por el coche eléctrico y que Figueruelas tenga una producción de este tipo de vehículos.
A este respecto, Reilly, también consejero delegado de General Motors-Europa, puntualizó que compartía con el Ejecutivo español sus propósitos respecto al coche eléctrico como una alternativa de futuro en la movilidad.
Reilly, por su parte, apuntó que "Figueruelas es un recurso importante para General Motors y tengo la intención de que siga siéndolo".
Sobre el plan industrial de GM-Opel para Europa no quiso entrar en detalles y sólo se limitó a señalar que los pormenores del mismo se conocerán a finales del próximo mes de diciembre.
El directivo del fabricante automovilístico dio cuenta de las reuniones que celebró esta semana con el Gobierno de Aragón y con los sindicatos más representativos de la planta zaragozana y que calificó de muy cordiales.
Reilly expresó su deseo por superar cuanto antes esta fase de planificaciones previas, "porque tenemos planes de producto muy interesantes y queremos que la gente empiece a pensar en el futuro".
Sebastián reiteró que el acuerdo alcanzado con Magna es el suelo sobre el que parten las premisas del Gobierno español respecto al futuro de Figueruelas, "pero desde un suelo siempre se puede construir algo mejor".
Las dos partes no ocultaron durante su breve comparecencia conjunta ante los medios la satisfacción por los resultados y el talante de este encuentro, e incluso, Sebastián, muy afónico por un proceso gripal, dijo: estoy tan contento que he recuperado la voz.
Reducción de capacidad
El consejero delegado de General Motors Europa concluyó este viernes, tras una semana visitando los países con fábricas de Opel, que la empresa debe reducir la capacidad de producción en el Viejo Continente entre un 20% y un 25%.
"Lo que está claro es lo siguiente: Opel/Vauxhall debe reducir su capacidad en toda Europa de alguna forma entre el 20% y el 25%", manifestó Reilly en su 'blog', que comenzó a escribir este viernes en España.
El directivo insistió en que la compañía está ultimando los detalles del plan de reestructuración para Opel, por lo que la próxima semana volverá a reunirse en Bruselas con responsables gubernamentales de los cinco países con plantas de la marca.
Su objetivo es presentar a mediados de diciembre un plan de reestructuración en el mejor interés de Opel y Vauxhall, claramente definido y con el objetivo de conseguir resultados patentes.
"He pasado la última semana visitando Alemania, Reino Unido, Polonia, Bélgica y España, desde donde escribo esto (...) La respuesta a estas visitas ha sido bastante positiva, pero no quiero subestimar el dolor de los trabajadores que han vivido en el limbo durante mucho tiempo", añadió.
En este sentido, Reilly lamentó la frustración de los empleados que están produciendo los mejores coches de Opel y Vauxhall en los últimos años -como el Insignia o el Astra-, y cuyos esfuerzos se ven ensombrecidos por actuaciones empresariales.
Por último, el también vicepresidente de Operaciones Internacionales de GM se comprometió a trabajar lo más rápido posible para solucionar la situación actual de Opel, y asegura que se ha decidido a crear el 'blog' para seguir escuchando y aprendiendo, y para compartir sus ideas.