California demanda a Trump por desplegar tropas en redadas migratorias sin autorización estatal

En medio de las crecientes protestas en Los Ángeles contra las redadas migratorias impulsadas por la Casa Blanca, Trump ha autorizado el envío de tropas sin contar con la aprobación del gobernador del estado, Gavin Newsom, lo que ha generado el rechazo desde las instituciones californianas. Según ha confirmado este lunes el portavoz principal del Pentágono, Sean Parnell, la orden presidencial busca “garantizar la seguridad de los agentes federales en el cumplimiento de sus funciones”.
“Por orden del presidente, el Departamento de Defensa está movilizando 2.000 guardias nacionales adicionales en California”, comunicó Parnell a través de su cuenta oficial en X (antiguo Twitter).
Con esta nueva oleada, el número total de militares desplegados en el área metropolitana de Los Ángeles asciende ya a 3.700 efectivos. De ellos, 1.700 pertenecen al 79º Equipo de Combate de la Brigada de Infantería de la Guardia Nacional de California, según ha detallado el Mando Norte del Ejército de Estados Unidos. Además, se han sumado unos 700 marines movilizados durante las últimas horas para apoyar el dispositivo.
California politicians must call off their rioting mob.
— Homeland Security (@DHSgov) June 9, 2025
Federal law enforcement are working to protect and safeguard American citizens from criminal illegal aliens.
Why is California’s governor siding with foreign criminals? pic.twitter.com/MoZLCx7nih
California lleva a Trump a los tribunales
La decisión del presidente ha provocado una respuesta legal. La Fiscalía de California ha anunciado la interposición de una demanda contra Trump y el secretario de Defensa, Pete Hegseth, al considerar que el despliegue de tropas es “ilegal” y “provocador”. Desde el estado se denuncia que la medida fue tomada de forma unilateral, “sin el consentimiento del gobernador ni el apoyo de las autoridades locales”.
“La movilización de la Guardia Nacional ha sido impuesta sin la autorización expresa del Ejecutivo estatal, lo que representa una intromisión inaceptable y contraria al equilibrio de poderes”, han indicado fuentes del entorno del gobernador Newsom.
La situación en Los Ángeles continúa siendo delicada, con miles de ciudadanos movilizados en rechazo a las redadas migratorias ordenadas por la administración federal. Las protestas, en muchos casos pacíficas, han coincidido con un importante aumento de la presencia militar en las calles, lo que ha encendido aún más los ánimos entre activistas.
Desde el gobierno federal no se descartan nuevas acciones si las autoridades estatales no cooperan.