Anna Simon, persona "non grata" en Cataluña

Obélix, ya saben el mítico hombre "fuerte, que no gordo" que se cayó en una marmita de poción mágica de pequeño, decía aquello de "están locos estos romanos". Cualquier español, sin tener que haberse caído en un perolo de cualquier comida autóctona (la magia para Harry Potter), podría decir con más razón que un santo lo de "están locos estos catalanes".

Y en este caso ni tan siquiera sería por su manía de independizarse, que mira que les ha entrado gorda (y no por su lotería navideña), sino por la campaña contra Anna Simon en la que están ahora metidos. El pecado de la rubia más sexy de nuestra televisión no ha sido decir "Visca el Real Madrid", ni tan siquiera "Visca España" o "Visca Rajoy" (esto último sí sería para hacérselo mirar), sino ¡brindar por el nuevo año con un botellín de cerveza!

Por tamaño "sacrilegio", según ellos, poco menos que habría que quitarle a la presentadora su carnet de catalana (la chica vino al mundo en Mollet del Vallés) y prohibirle que pase del territorio aragonés.

Y por si alguien no lo sabía en el "país catalá", un diario tan de la tierra como La Vanguardia se ha encargado de recordárselo, calificando a la moza de "reina renegada" por hacer tamaña afrenta a ese pueblo en un spot de fin de año que se verá en una gran cantidad de cadenas apenas dos meses después de haber sido elegida "reina del cava" en una ceremonia "despampanante" organizada por la autodeterminada Cofradía del Cava.

Como se puede leer en dicho diario, al presidente de la patronal Pime Cava "no le ha gustado nada que se vuelva a brindar con cerveza, y aboga por revisar las condiciones de contratación de las reinas del cava". ¿Obligarán a partir de ahora a las elegidas a no poder beber ninguna otra bebida el resto de sus vidas? ¿Le pedirán a Mas penas de prisión para quien no brinde con cava?

Primero fue lo de casi prohibir el castellano por esas tierras, ahora lo del cava... A este paso pronto obligarán a todos los ciudadanos a incorporar a su vestuario al menos una camiseta del Barça, o como mucho del Español, y a impedir que los niños desayunen una rosquilla o bollería industrial. Que para eso tienen el "pan tumaca". ¿Están o no están locos estos catalanes?