Esta campaña ha sido una de las más polémicas en la historia del país, ya que ha estado marcada por una serie de incidentes y escándalos que podrían haber salido de una película.
La campaña ha estado marcada por las acusaciones, escándalos y la presencia de ETA, que ha sido utilizado contra el PSOE. El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y su partido han estado en todo momento en el punto de mira del PP y de Vox.
Ada Colau, Mónica García, Joan Baldoví o Joan Ribó son algunos de los candidatos de la izquierda que se postulan para las alcaldías y comunidades de sus respectivos territorios. Sus resultados en el 28 de mayo serán cruciales para trazar la posición de este espacio de la izquierda de cara a las elecciones generales.
Desde el PSOE a Unidas Podemos, todas las formaciones a la izquierda han defendido su gestión frente a la crisis que ha venido sufriendo nuestro país desde 2019. Por ello, el 28 de mayo la ciudadanía decidirá si han resultado ser políticas útiles y eficaces para la protección y mejora del estado del bienestar, así como si aprueban los próximos proyectos planteados por los mismos.
Los elementos reivindicados por la izquierda para atraer el voto han sido la Ley de Vivienda, que promete mejorar la situación de los alquileres y el acceso a la vivienda en lugares con precios abusivos, y el refuerzo de un modelo sanitario público que ha concentrado numerosas protestas por España; especialmente en Madrid, donde se han registrado incluso huelgas ante el colapso del sistema.