Alejandro Hernández deja el Comité Ejecutivo Provincial de Vox Córdoba
Alejandro Hernández ha presentado su dimisión como presidente de Vox en Córdoba durante la mañana del miércoles 22 de febrero, a menos de 100 días de las elecciones municipales del 28 de mayo en las que cuentan con Yolanda Almagro como candidata. De entrada, continuará trabajando dentro del Parlamento de Andalucía para la formación de Santiago Abascal. Alejandro Hernández deja vacío el frente de Vox en Córdoba, en la presidencia del Comité Ejecutivo Provincial, después de más de cinco años en un momento crítico para la política andaluza.
Alejandro Hernández habla de fracaso personal el hecho de que haya algunos lugares tanto en las elecciones nacionales como en las autonómicas donde Vox no esté presente después de varios años como una de las principales fuerzas políticas a nivel nacional. También habla de frustración ante el hecho en un momento donde las previsiones apuntan a que no habrá muchos avances con respecto a las elecciones municipales de 2019. Así lo apuntan los datos del Centro de Estudios Andaluces (CENTRA), si bien se basan en datos de noviembre y diciembre, pudiendo cambiar el panorama en las comunidades autónomas en la recta final antes del 28 de mayo.
Alejandro Hernández lleva varios años dentro del Parlamento de Andalucía trabajando para Vox, ocupando tanto cargos de Vocal como de secretario y vicesecretario en diferentes comisiones para la formación verde. Entre estas comisiones están la de Fomento, Infraestructuras y Ordenación del Territorio, la de Empleo, Formación y Trabajo Autónomo o sobre la Discapacidad en Andalucía. Alejandro Hernández también ha sido portavoz del grupo parlamentario en Andalucía entre febrero de 2019 a agosto de 2021.
Declaraciones de Alejandro Hernández
«Cuando empecé a colaborar con el partido, allá por el 2017, éramos muy poquitos. De hecho, algunos que han vuelto ahora se habían ido. No éramos más de 30 o 40 afiliados y a las reuniones no íbamos más de 5 o 6. Gracias al trabajo de presidentes que me precedieron, como el tristemente fallecido Pablo Fernández o Sebastián Bel, poco a poco empezamos a dar algunos pasos hacia adelante«, comenzó a explicar Alejandro Hernández a través de sus espacios en redes sociales.
«Yo seguí esa senda y, con la ayuda de unos cuantos compañeros, llegamos a convertir esa inercia en una fuerza política; con una organización rudimentaria, pero organización al fin y al cabo; con la argamasa de la confianza mutua y la honestidad de todos los que colaborábamos desinteresadamente en ese empeño. No había “agendas personales” (al menos yo lo sentía así entonces).
«Siempre tuve claro que el proyecto está por encima de las personas y, por eso, intenté rodearme de los que compartían conmigo ese postulado. Mucha gente se nos ha acercado: a algunos no les convencimos; otros no nos convencieron a nosotros, y alguno que otro nos engañó. Como dijo Santiago Abascal en la plaza de toros de Murcia, mis excusas. Ser la cara de Vox sigue siendo una decisión compleja y aún más en los entornos rurales de la Andalucía interior. Por ello, ofrecer cobertura y cariño a quienes dan un paso al frente debería ser una prioridad para nosotros.«
«Cuando se ostenta honradamente una responsabilidad hay que tomar decisiones anteponiendo siempre el interés del partido a cualquier otro. Y esto te lleva a perder amigos y “camaradas” defraudados en sus expectativas personales. Acepté, y de buen grado, las críticas, constructivas o no, cuando al menos fueron educadas. Pero tener que soportar insultos y difamaciones llega a ser muy cansado. Estos “tontos entregados” de photocall son pocos (diría que los cuento con los dedos de las manos) y cobardes, aunque a veces hagan mucho ruido», criticó el hasta ahora principal responsable de Vox en Córdoba.
«Sí he echado de menos que por parte de la dirección nacional se haya estado más pendiente de atender las quejas de esos cuatro alborotadores que de disciplinarlos. Ojalá me equivoque, pero creo que ese error pasará su factura. No vine a servirme de Vox para mi promoción particular sino a trabajar por unos ideales. Y lo seguiré haciendo mientras pueda y lo mejor que pueda desde el Parlamento de Andalucía,» detallaba Alejandro Hernández, dejando claro que continuará con su cargo parlamentario en el futuro.
«Leo de Julio Ariza que la fuerza de Vox está en sus bases y en que lo que defiende representa a muchos españoles. Estas sin afirmaciones que comparto plenamente. Quienes me conocen me habrán escuchado desde hace tiempo palabras parecidas. Dios quiera que esas gradas llenas de Murcia sirvan para que Vox no llegue a convertirse en otra red clientelar más como lo son otros partidos.»
«De mi andadura como presidente me llevo la estima y el afecto de la inmensa mayoría de los nuestros, el respeto de los rivales políticos y creo que el de los profesionales de la comunicación honestos; también me quedará el resentimiento de los pocos trepas y advenedizos que traté y a los que mantuve alejados del partido.«
«Siempre consideré que ese peaje iba incluido con el “sueldo de presidente”, y si antes no me afectó mucho, ahora, francamente, me importa un bledo«, finalizó Alejandro Hernández en sus espacios en redes sociales.
Cambiar de líder a menos de 100 días
Vox tiene ante sí una difícil papeleta. A apenas tres meses de las elecciones municipales, su principal cabeza en Córdoba deja su cargo en el Comité Ejecutivo Provincial cuando todos los partidos en diferentes municipios andaluces están en plena carrera electoral. La gestión de José María Bellido, actual alcalde de Córdoba por el Partido Popular, sigue gozando de bastante popularidad, salvo por algunos colectivos. Su principal rival es Antonio Hurtado, líder de la lista del PSOE Córdoba. En la lista se encuentra también Carmen Calvo, quien fuera vicepresidenta del gobierno de España hasta que Pedro Sánchez remodelara el ejecutivo en julio de 2021.
Esta decisión del hasta ahora presidente del Comité Ejecutivo Provincial afecta sobre todo a Almagro, la candidata de Vox – después de que esta superara a la que fue portavoz del grupo municipal de Vox en el Ayuntamiento de Córdoba, Paula Badanelli. Hernández ha sido clave en el buen funcionamiento entre los miembros, así como para futuros planes de Vox en la ciudad de Córdoba.
La dimisión de Alejandro Hernández se suma a otras dimisiones recientes dentro de Vox. Semanas atrás se marchaba el coordinador de Vox en Córdoba capital Julián Urbano, así como Alberto Cuevas que había ejercido de gerente del partido.