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Detenida una mujer en Vallecas por el asesinato de su bebé hallado en el vertedero de Loeches

La Guardia Civil detiene a una mujer de 35 años por la muerte violenta de su hija recién nacida cuyos restos fueron descubiertos en una planta de reciclaje. La pequeña fue degollada y arrojada a un contenedor de basura en Puente de Vallecas

Planta-reciclaje-Loeches
Planta-reciclaje-Loeches

Madrid sigue consternada tras confirmarse que los restos humanos hallados en el vertedero de Loeches el pasado 12 de diciembre pertenecen a una niña de apenas cinco días de vida, víctima de un crimen atroz. Según la investigación de la Guardia Civil, la recién nacida fue asesinada de forma violenta, en un caso que ha estremecido a los vecinos de Vallecas, donde residía la detenida.

Una autopsia clave para resolver el caso

Los primeros indicios forenses, confirmados por la autopsia, revelaron que la niña nació con vida y fue degollada, descartando que las heridas más graves se produjeran en la cinta transportadora del complejo de reciclaje.

La autopsia practicada en el Instituto de Medicina Legal ha sido clave para esclarecer las circunstancias del crimen. La niña murió asfixiada y decapitada, en lo que los investigadores califican como una muerte de carácter violento con claros indicios de criminalidad.

'Operación Natal'

Tras semanas de investigación dentro del marco de la ‘Operación Natal’, la Guardia Civil ha detenido a Erika, una mujer de 35 años, casada y con tres hijos, como presunta autora del asesinato. La arrestada fue localizada y detenida en su vivienda del distrito de Puente de Vallecas.

En el registro del domicilio, los agentes hallaron rastros de sangre de la bebé, lo que refuerza la hipótesis de que la recién nacida fue asesinada en la propia vivienda familiar. Posteriormente, su cadáver habría sido descuartizado y arrojado en varias bolsas de basura a contenedores situados junto a la M-30, desde donde acabó en el vertedero de Loeches.

Una detención que reabre un caso de 2004

Las investigaciones han sacado a la luz un dato inquietante. Erika ya estuvo vinculada a la muerte de otro bebé en 2004, cuando todavía era menor de edad. En aquella ocasión, dio a luz a un niño que murió pocos días después de nacer. El caso se cerró sin consecuencias penales, pero ahora la Guardia Civil ha reabierto la investigación para determinar si aquella muerte fue también provocada.

La madre, de origen ecuatoriano y residente en Madrid desde hace más de 20 años, se enfrenta ahora a una posible imputación por homicidio doloso con el agravante de parentesco, lo que podría conllevar la prisión permanente revisable, según fuentes consultadas.

El hallazgo en Loeches

Los hechos ocurrieron durante la madrugada del 12 de diciembre de 2024, en torno a la 1:46 horas, cuando un operario del centro de reciclaje de Loeches encontró restos humanos en la aguja de prensado de la instalación. La Guardia Civil precintó dos bolsas de basura y tomó muestras de ADN del cuerpo para iniciar las pesquisas.

Tras semanas de análisis y comparativas genéticas, los agentes lograron identificar el cuerpo como el de una niña recién nacida. La colaboración ciudadana ha sido clave, y la Benemérita ha reiterado su llamamiento a través del número 062 para obtener más información sobre este suceso.

Conmoción en Vallecas

La noticia ha generado una enorme conmoción en Vallecas, especialmente entre los vecinos de la detenida. Nadie imaginaba un desenlace tan cruel. Mientras tanto, la investigación sigue abierta y no se descartan nuevas diligencias o imputaciones en las próximas semanas.

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