Última hora

Duch, el jefe torturador del Jemer Rojo no padece transtornos mentales

"No hemos detectado ningún problema mental en el acusado", aseguró el doctor Sironi-Guilbaud.

Duch ha confesado durante las vistas que ordenó ejecutar a personas que él mismo torturó e incluso ha reconocido que sus subordinados mataron a decenas de bebés aplastando sus cráneos contra los árboles de los llamados "campos de exterminio" de Chieung Ek, a las afueras de Phnom Penh.

No obstante, este antiguo profesor de matemáticas ha negado reiteradamente que participara en la toma de decisiones de la cúpula del Jemer Rojo y siempre ha defendido que cumplió lo mejor que supo las órdenes que recibía.

Además, dirigió Tuol Sleng o S-21, la temida prisión para presos políticos y por la que pasaron al menos 14.000 personas antes de ser ejecutadas.

Duch es el oficial de menor rango de entre los cinco ex miembros del Jemer Rojo que el tribunal pretende juzgar por su implicación en el genocidio en Camboya, donde 1,7 millones de personas murieron a causa de la hambruna, enfermedades y las purgas ordenadas por el régimen que gobernó el país desde 1975 hasta 1979.

Aún deben ser juzgados Khieu Samphan, ex jefe del Estado; Nuon Chea, "hermano número dos" e ideólogo de la organización; e Ieng Sary y su esposa Ieng Thirit, ex ministro de Exteriores y ex titular de Asuntos Sociales, respectivamente.

Pol Pot, el "hermano número uno" y máximo dirigente del Jemer Rojo, falleció en la jungla camboyana en 1998.