viernes, abril 26, 2024
- Publicidad -

No llegará el olvido

No te pierdas...

La estrategia política de negar la realidad, de silenciar no sólo el nombre si no los hechos hasta la extenuación, no le va a servir al PP para que un manto de silencio tape la corrupción.

Cuando unos lo pierden todo mientras otros roban a manos llenas ya no sirve el silencio como respuesta

Como un goteo mortífero, día a día, el escándalo del caso Gürtel persigue, allí donde van, a los dirigentes del partido. De nada han servido las estrictas normas de comunicación que envían desde Génova 13 los estrategas del PP. Argumentario basado en dos conceptos que los militantes deben repetir como un mantra: el caso Bárcenas está judicializado, por tanto hay que dejar que los jueces hagan su trabajo, y el PP es el partido que más ha luchado contra la corrupción en España con la ley de transparencia.

Desconcertados y desorientados, determinados dirigentes del partido rehuyen a la prensa pero hacen llegar su malestar por el escarnio del que son objeto cuando salen a la calle. Dos ediles de San Carlos de la Rapita en Tarragona no han aguantado la presión y abandonan unas siglas que les han dejado, dicen, inermes ante la opinión pública. No son los primeros ni serán los últimos.

Por mucho que se envíe a los antidisturbios para proteger a los cargos que se sienten amedrentados por ciudadanos que empapelan sus portales o les insultan en los bares, la indignación popular no va a parar.

Cuando los escándalos de corrupción van unidos al empobrecimiento de gran parte de la sociedad, cuando unos lo pierden todo mientras otros roban a manos llenas ya no sirve el silencio como respuesta.

No sirve la excusa de la judicialización del escándalo cuando la gente tiene la más que fundada sospecha de la utilización de la maquinaria del poder para controlar a los jueces. Cuando se ponen en juego todos los resortes de que dispone el ministro Gallardón para apartar del caso, no ya a Garzón, también a Gómez Bermúdez. Es verdad que este último hizo una irrupción desmesurada e histriónica en la causa, pero la sola mención de su nombre levanta ampollas en el entorno del Gobierno. Nunca le perdonarán la impecable sentencia del atentado del 11M que tiró por tierra una teoría de la conspiración que encubría la mentira sobre la autoría del peor atentado de la historia de España.

Así no podemos seguir, escondiéndonos no llegará el olvido

El juez Ruz tiene sobre sus espaldas la responsabilidad de demostrar que efectivamente quería la causa convencido como dice estar de la conexión entre Gürtel y Bárcenas, dato obvio dado la cantidad de veces que el nombre del extesorero aparece citado con siglas o con epítetos en las conversaciones de los capos de la trama corrupta.

Rajoy retoma la agenda internacional pero sigue, como María Dolores de Cospedal o su segundo Floriano, o la vicepresidenta Sáenz de Santamaría, sin dar explicaciones ante la prensa. Con retraso y para cumplir con los estatutos se convoca la Junta Directiva Nacional. ¿No habrá nadie con agallas suficientes para poner sobre la mesa el malestar de parte de las bases del partido? Alguien que diga: así no podemos seguir, escondiéndonos no llegará el olvido.

Estrella Digital respeta y promueve la libertad de prensa y de expresión. Las opiniones de los columnistas son libres y propias y no tienen que ser necesariamente compartidas por la línea editorial del periódico.

Victoria Lafora

Relacionadas

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí

- Publicidad -

Últimas noticias

- Publicidad -