La Policía alemana ha confirmado que ha localizado el cadáver del sospechoso de ser el autor del tiroteo en un centro religioso de testigos de Jehová que ha dejado, al menos, siete víctimas mortales en Hamburgo.
El suceso se ha producido en el barrio de Gross Borstel, donde se puso en marcha una «gran operación policial» con «un gran contingente de fuerzas».
Pasadas las 21:00 horas de este jueves, la Policía recibía la alerta, mientras se celebraba un evento con medio centenar de asistentes en el centro religioso.
Según el diario ‘Der Spiegel’, el tirador sería un antiguo miembro de la comunidad y no estaba catalogado por las autoridades como extremista.
Ocho personas han fallecido, incluido el tirador, y al menos otras ocho han resultado heridas en el ataque, según recoge DPA. Entre las víctimas mortales se encontraría un bebé nonato.
La Policía, que cree que el atacante actuó en solitario, acudió rápidamente al lugar de los hechos, donde encontraron varias personas gravemente heridas y varias muertas. El tirador corrió escaleras arriba y se quitó la vida cuando llegó la Policía.
Las autoridades han habilitado un portal en su página web para que las personas que tengan información puedan facilitar imágenes o vídeos de lo ocurrido.